Urú Curé, el campeón de los 44 mil kilómetros
La unión y el esfuerzo distinguen al club de Río Cuarto, flamante ganador del Nacional de Clubes “B”.
“Entrar al Nacional de Clubes ‘B’ ya era estar dentro de los 32 mejores clubes en un país que tiene 500, más o menos. Y ser campeones significa que quedamos entre los 17 primeros. Es un orgullo enorme y más siendo del interior del interior”, dice el presidente de Urú Curé, Guillermo Sona, con una alegría inocultable.
Al hablar del título conseguido el sábado tras vencer 23-20 sobre la hora a GER, el dirigente destaca un atributo de la institución de Río Cuarto: el sacrificio. Y es cierto. Se trata del único club que para competir viaja a Córdoba cada 15 días. “Entre todas las divisiones de rugby y hockey, el club viaja 44 mil kilómetros por año. Los jugadores lo hacen desde los 4 años y ya están acostumbrados. Nunca vas a encontrar a uno que diga ‘uhh, hay que ir a Córdoba’. Para nosotros termina siendo una fortaleza”, agrega el directivo.
El capitán Gaspar Oberti coincide con Sona. Cada viaje representa un ladrillo más en esa fortaleza en la que se ha convertido La Lechuza. “Entre viaje y almuerzo nos sale 500 pesos más o menos. Es un esfuerzo al que otros clubes no están acostumbrados. Desde las 7 delamañanaalas11delanoche estamos juntos. Y eso genera algo especial en el grupo”, apunta.
Hasta la década pasada, Urú Curé, que va por los 64 años de historia, estaba lejos de pelear arriba. Jamás ganó un título local, por ejemplo. Sin embargo, los cambios institucionales trajeron éxitos deportivos. En 2010 se inauguró un nuevo predio y a partir de 2013 jugó cinco finales y festejó tres títulos entre Nacional e Interior.
“Demostramos que no es un tema de una sola camada buena. En el plantel campeón hay al menos un jugador de las camadas ’89 a ’99. Eso habla del buen trabajo”, aporta el entrenador Diego Ghiglione.
El juego de Urú Curé se caracteriza por la fortaleza de su pack de forwards, desde el que intenta someter a sus rivales. Sin embargo, de a poco ha intentado incorporar otras variantes. “Hace unos años intentamos integrar más el juego y fortalecer aspectos como darle más dinámica. Pero la verdad, nos sentimos cómodos jugando con los forwards porque el rival hace un gran desgaste. Sabemos que a eso tenemos que agregarle un montón de cosas. Desde hace unos años venimos mejorando. Las planillas marcan que ahora damos dos y tres veces más pases que antes”, dice Oberti.
De ahora en más, con su tercera vuelta olímpica en el ámbito nacional (2013, 2014 y 2018), “Urú” intentará transformar este festejo en un nuevo impulso para dar pelea en el torneo local.