Yohana pudo abrir sus ojos
Yohana Castro, la joven de 26 años que fue única sobreviviente de la masacre ocurrida el 28 de junio pasado en Villa Sarmiento (Traslasierra), despertó, para asombro de muchos, luego de atravesar un mes en estado de coma.
En la tragedia de aquel día, en su casa, murieron su madre y su hermano, a manos de la expareja de Yohana. El agresor, minutos después, se suicidó. La joven sufrió varios disparos que la dejaron en muy grave estado.
Aun en la terapia intensiva del hospital San Roque de Córdoba, podría pasar a sala común dentro de algunas horas, confirmaron fuentes judiciales.
La joven, madre de dos varones de 8 y 2 años, fue desconectada de su asistencia respiratoria y se alimenta y se comunica con suficiencia. “En los últimos días tuvo una mejoría milagrosa, está comiendo bien y hablando, está con asistencia psicológica, y es posible que hacia el fin de semana la pasen a sala común”, relató Carlos Hernández, un amigo de la familia diezmada en la tragedia.
Yohana estuvo más de 30 días en estado gravísimo, en coma farmacológico, luego de ser operada aquella noche en el hospital de Villa Dolores, después de recibir en su pecho y en su cuello dos disparos de un arma calibre 32 de su expareja, Federico Cortez (30).
El agresor, en el mismo episodio, mató a sangre fría al hermano de la chica, Emanuel Castro (21), y a la madre de ambos, Deolinda Alvarez (43).
La joven, herida en uno de los hechos policiales más graves que se recuerde en Traslasierra, estuvo internada una semana en terapia intensiva del hospital de Villa Dolores. Luego, dada su gravedad, fue derivada de urgencia a la ciudad de Córdoba.