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recimiento del ajuste fiscal.
La situación copó la agenda del presidente Mauricio Macri, quien mantuvo un extenso encuentro con Nicolás Dujovne en la quinta de Olivos para definir los detalles de la propuesta que el ministro de Hacienda llevará el próximo martes a Washington para solicitarle personalmente a la titular del Fondo, Christine Lagarde, la liberación de las partidas previstas para
2020 y para 2021.
El dólar retrocedió ayer $ 1,78
(4,4%) respecto de la cotización que alcanzó en el “jueves negro” y terminó la semana a $ 36,18 para la compra y a $ 37,99 para la venta en las pantallas minoristas, según el relevamiento oficial de la autoridad monetaria.
El Central aplicó tres subastas, que se reforzaron de modo escalonado, y consiguió alejar a la divisa norteamericana de los $ 40. Caputo instruyó a la mesa de dinero del Central que, apenas iniciadas las operaciones, saliera a ofrecer U$S
75 millones y que la intervención se repitiera pasado el mediodía, con U$S 100 millones, y antes del cierre, con U$S 500 millones.
La estrategia oficial pasa saciar la demanda se acompañó con una señal política, que llegó desde el FMI: su portavoz, Gerry Rice, manifestó, a través de un comunicado, que la Argentina cuenta con “el pleno respaldo” y que en el organismo “confían en que el fuerte compromiso y la determinación de las autoridades argentinas ayudarán al país a superar las dificultades actuales”.
El dólar mayorista, que inició la jornada ofreciéndose a $ 39 ($ 1 más que el jueves) revirtió su rumbo, delimitado por las intervenciones del Central. En la primera subasta, se adjudicaron 75 millones, a un precio promedio de corte de $ 37,61, y la divisa norteamericana se acercó a los $ 38,5.
En la segunda intervención se colocaron U$S 100 millones, a $ 37,3 en promedio, y la moneda verde volvió a caer para posicionarse en torno a los $ 37,40. Y, para evitar cualquier sorpresa, el Central reapareció sobre el cierre para inyectar otros U$S 75 millones, a un precio promedio de $ 36,9.
Así, el dólar en la plaza mayorista, donde operan bancos y empresas, registró una caída de $ 1,75 respecto de la sesión previa y terminó a $ 36,85 pesos para la venta. “Un clima algo más distendido y algo de oferta privada colaboraron con la estrategia oficial para recortar parcialmente la fuerte suba del dólar en la semana”, evaluó el operador Gustavo Quintana.
“En agosto, el dólar acumuló un aumento de $ 8,54 con relación al cierre de julio pasado. En lo que va de 2018, el dólar suma un 95,60% de aumento con relación al fin de diciembre de 2017”, calculó.
En la plaza minorista, en tanto, el billete acumuló un alza de 20,7% esta semana; de 35,6% durante agosto; avanzó 100,8% en los primeros ocho meses del año, y alcanzó una suba del 116% en los últimos 12 meses.
Fue la culminación de una semana de pánico, en la que el mercado catapultó al dólar y abandonó posiciones en los activos argentinos por la creciente desconfianza sobre la capacidad del Gobierno para sortear los próximos desafíos económicos y sobre la solvencia de la Argentina para cumplir con sus compromisos financieros.
Los inversores desoyeron las palabras del propio presidente Macri, quien salió a asegurar que el FMI adelantaría las partidas necesarias, y continuaron presionando. La desesperación tocó su máximo nivel el jueves, cuando el dólar llegó a superar los $ 41 y circularon rumores sobre posibles cambios en el gabinete nacional.
La situación obligó a tomar medidas urgentes y Dujovne anunció que la próxima semana, el martes, se reunirá con Lagarde para iniciar formalmente la negociación para acceder al resto de los fondos del crédito de hasta 50 mil millones de dólares que el Gobierno solicitó el 20 de junio pasado.
Macri y el titular de Hacienda analizaron, durante largas horas y en un total hermetismo, las propuestas para acortar el camino hacia el equilibrio fiscal. La idea original era llevar el déficit hasta el 1,3% del producto interno bruto (PIB) a fines de 2019, pero ahora la misión sería tratar de alcanzar el 0,5%. Tregua en el mercado cambiario y bursátil. El riesgo país, elaborado por el banco JP Morgan, cayó 5 unidades a 771 puntos básicos (0,6%) luego de trepar de forma estrepitosa.
LAS ACCIONES ARGENTINAS EN NUEVA YORK TUVIERON EUFORIA ALCISTA, POR ARRIBA DE 20%,T RAS DÍAS DE SANGRÍA.