Detrás del matrimonio
En “La esposa”, un suceso clave desencadena la crisis de una longeva pareja.
Glenn Close, que hace de mujer dañada por su cónyuge, vincula el filme al feminismo actual.
Nominada seis veces a los Óscar, la siempre espléndida Glenn Close se anticipa como favorita a la estatuilla dorada por su papel en La esposa, un drama que, en su opinión, “encaja de lleno en el movimiento feminista ‘Me Too’”.
Tras 40 años de matrimonio, Joan (Close) y el escritor Joe Castleman (Jonathan Pryce) aparentan ser el complemento perfecto el uno para el otro, pero una llamada informa a la pareja que el hombre ha ganado el premio Nobel de Literatura y detona una crisis latente que viene afectando a la mujer desde hace tiempo. La trama develará los sacrificios que tuvo que hacer la mujer, una aspirante a escritora, para sacar adelante la relación –
que termina siendo tóxica– y las decisiones que afectaron a la relación de la pareja con su propio hijo.
“El guion me llegó hace cuatro años a través de mi agente”, explicó la actriz estadounidense. Y agregó: “No dudé al decir que sí, pero el personaje me suscitaba muchas preguntas. Me intrigaba, por ejemplo, ¿por qué nunca dejó a su marido? Trabajé mucho con el director para conocer la personalidad del personaje y saber a fondo qué les había ocurrido a los dos. Es una relación que evoluciona. Al principio, en su juventud, están locamente enamorados. Eso la lleva a ella a aceptar situaciones que no son de su agrado. Pero todos los que hemos estado casados conocemos de sobra los sacrificios que se hacen por la persona que querés”.
La cinta dirigida por el sueco Björn Runge se desarrolla en 1993 y viaja al pasado para explicar la relación desde sus comienzos, a fines de la década de 1950 (en papeles jóvenes encarnados por Harry Lloyd y Annie Starke, hija de Close en la vida real), y para mostrar cómo se sientan las bases de la relación.
Esos secretos de alcoba amenazan con salir a la luz ante la insistencia de un periodista (Christian Slater) que planea escribir la biografía de Castleman. Sin ánimo de espoilear, La esposa guarda relación con la efervescencia del “Me Too”. “La cinta encaja de lleno en el movimiento”, reconoció Close.