Mon Laferte.
La cantante llega a Córdoba por primera vez con un show en la Plaza de la Música. En la previa, habla de su consagración, de su nuevo disco y de sobre ser músico en Latinoamérica.
“Fluyo cuando canto”, dice la cantante que va a actuar el jueves por primera vez en Córdoba.
“Fluyo cuando canto”, se lee en las bíos que Mon Laferte dispuso en sus perfiles en redes sociales. Lo que en alguien corriente podría interpretarse como una simple frase sentimental, en la cantante chilena suena más bien a una declaración de principios: tanto en estudio como en vivo, sus interpretaciones demuestran que estamos frente a una artista enorme, de un caudal vocal privilegiado y de una expresión grandiosa.
Suficiente con ver su consagratoria participación en el Festival de Viña del Mar del año pasado –disponible en YouTube, por supuesto– para caer en la cuenta de que lo de Mon Laferte es cosa seria. La artista llega a Córdoba el jueves para ofrecer un concierto en la Plaza de la Música, en la que será su primera vez en nuestra ciudad y, además, el primer recital de su gira por Argentina y por Uruguay.
Mon Laferte llega para presentar La trenza, su último disco, aunque seguramente su repertorio contemple canciones de otros momentos de su carrera.
–Has coqueteado con muchos géneros musicales. Ya que vas a visitar Córdoba, quería preguntarte si conocés la música de cuarteto.
–No soy experta, pero sí he escuchado cuarteto. Me gusta la música argentina en general, aunque te mentiría si te digo que conozco ampliamente. Me parece interesante ir a un lugar y conocerlo más a fondo. Yo soy muy vintage ,me gusta comprar discos, porque cuando uno visita sitios se encuentra con la música físicamente, así que espero con ansias ir para allá. Y te cuento algo: mi primera fan argentina es de Córdoba. La primerísima. Así que espero que vaya al concierto.
–A propósito de tu relación con la música argentina, colaboraste en el unplugged de Los Auténticos Decadentes. ¿Cómo fue esa experiencia?
–Claro, en la canción Amor .Me divertí mucho, todos son súper buena onda, muy chistosos, así que me sentí como en casa. Sólo conocía a Gastón (Bernardou), y cuando llegué al ensayo vi que todos eran una familia, todos haciendo bromas…Para que me relajara, Jorge (Serrano) me decía “tranquila, yo canto mal” (risas). Así que me divertí un montón, quedó superbonito, los arreglos están increíbles, hay versiones que les van a encantar a los fans. Amor es una supercumbia, no es una canción tan conocida de ellos. Le dieron una nueva oportunidad, merecía ser sencillo.
–Leí un artículo en el diario “La Tercera” en el que se te comparaba con Miguel, el protagonista de la película “Coco”, porque habían tenido infancias similares. ¿Lo leíste?
–No leí ese artículo que mencionas, pero a mí no me prohibieron tocar, hacer música, en mi casa. Tal vez a mi mamá le daba un poco de miedo, porque siempre está la cosa de que los músicos nos vamos a morir de hambre, y un poco de razón tiene (risas). Claro, vengo efectivamente de una familia trabajadora, humilde, pero siempre estuvo presente la música en la familia, vengo de una herencia de músicos. Más que mi historia personal, la película muestra un poco la historia de todos los músicos de Latinoamérica, que vienen del barrio, que tienen que trabajar y su sueño es la música, y de pronto la familia no los apoya. Es algo que nos ha pasado a un montón. Todos somos un poco el personaje de Coco.
–Si bien tu carrera ya venía ganando nuevos públicos y mercados, con “La trenza” se da tu consagración en todo el continente. ¿Qué sigue después de esta conquista?
–Acabo de grabar un disco. De hecho, me estoy adelantando un poco. Estuve en Los Ángeles, fue todo un experimento grabar un disco a la vieja escuela. Nos encerramos un grupo de músicos en los estudios Capitol y estuvimos tres días: dos de ensayo y uno de grabación, a la antigua. Todos al mismo tiempo en una sola toma, como se hacían antes los discos. Hoy casi ya nadie se atreve a hacer álbumes de esa manera. Y ya está listo, tengo fecha y todo, pero no me dejan decirla aún. No va a pasar mucho tiempo para que tengan noticias de ese disco.
–Uno de los grandes sucesos relacionados con la música latinoamericana de este año ha sido la serie de Luis Miguel. Allí muestran a un artista que estuvo en el ojo público desde muy joven. Más allá de no tener un padre como Luisito Rey, ¿encontrás un paralelismo allí con tu carrera?
–No la he visto, ¡y todo el mundo la vio! Estoy muy tentada de verla, todos me dicen “el papá era supermalo, que Luisito Rey esto y aquello... (risas)”. Luis Miguel es un artista que he admirado siempre, es de los mejores intérpretes que tenemos. Su elección de canciones... Soy fan, me gusta un montón, pero no vi la serie. Entonces no sé la vida que muestra la serie, de modo que no podría opinar.
Se mueve. En “Contigo” y junto a Stylo G, la rapera Mala Rodríguez se prueba en las lides del reggaeton y del dancehall.