Un disco con final accidentado y Fito Páez como invitado estelar
Según cuenta Saglietti, Hermafrodita floreció tras dos años de trabajo, y sus canciones fueron compuestas y grabadas durante la gira de Franco, su antecesor. “La banda suena más madura sin perder sensibilidad ni frescura”, destaca el músico sobre la obra que fue producida por Gonzalo Aloras, grabada en los mejicanos Panoram Studios y reivindicada en lo visual por la artista Nora Lezano.
Todo eso completa una identidad estética que ya había sido percibida en los cortes El invierno y Tan fuerte.
Saglietti: “Lo logramos. El final estuvo accidentado por la mezcla y realmente viví momentos estresantes por la presión del lanzamiento. En general, los discos anteriores los había hecho solo y sin tanta expectativa. Acá, en cambio, cinco personas laburaban de modo incansable y, de repente, empecé a entender que cargaba con mayor presión y responsabilidad”.
La presencia de Fito Páez en Villa Urquiza, una oda al barrio porteño de poesía cotidiana y directa, completa el diagnóstico de Hermafrodita. “Fue un sueño, realmente”, dice Saglietti sobre el invitado estelar.
Y sigue: “Una vez más, me di con que mis procesos creativos son un poco conflictivos... ¡Es que llegué una hora tarde a la sesión! No sabés lo que fue esa hora, yo trabado en el tráfico porteño y Fito en el estudio esperándome para grabar una canción mía. Llegué y él estaba escuchando el tema con la letra en un papel, donde además tiraba anotaciones. Me derretí de amor. Le metí un abrazo y le dije ‘gordo, perdoname, soy un gil, cómo voy a llegar tarde’. Me mira y me dice todo bien, man, rock & roll”.
–¿Cómo capitalizaste su presencia?
–Le dije que sí a lo que propuso. Todo lo que pasaba me parecía una obra de arte. En el tema se pega unos gritos hermosos, parece que está terminando un show en el Luna Park. Me cambió las letras. Tiró esas voces que son un delirio. El chabón estaba muy cebado. Se puso a rearmonizar el estribillo, me grabó unos bajos de referencia para que entendiera la rearmonización. Fue pura entrega. Los chabones superexperimentados que todavía tienen entrega son una fuente de inspiración absoluta.
“HERMAFRODITA” FUE COMPUESTO Y GRABADO EN LA GIRA DE “FRANCO”, SU ANTECESOR, Y MARCA UNA NUEVA ERA PARA FRANCISCA.