11.150.000

En la primera mitad de 2018, y por cuarto semestre consecutivo, la pobreza en el Gran Córdoba volvió a mostrar un registro mayor al 30 por ciento, un valor que continúa por encima del promedio nacional y de la mayoría de las otras ciudades de envergadura similar del país.

Según los datos dados a conocer ayer por el Indec, este distrito tiene un 30,3 por ciento de pobres, tres puntos porcentuales más que el promedio de los aglomerados urbanos medidos por la encuesta del organismo oficial que releva condiciones de vida.

Si la comparación se hace con otras grandes urbes de la Argentina, la diferencia también es marcada: en el Gran Rosario y en el Gran Mendoza, por ejemplo, el porcentaje de pobres no llega al 28 por ciento, siempre con datos del primer semestre de este año.

Si bien no se puede perforar el piso del 30 por ciento, la buena noticia para Córdoba y sus alrededores es que el porcentaje de pobres bajó en la comparación interanual (de 30,7 a 30,3 por ciento), y también en el cotejo con el semestre anterior: en el segundo segmento del año pasado, la pobreza había trepado hasta el 34,2 por ciento, según el Indec.

Hay que aclarar que los datos del organismo de estadísticas vienen siendo cuestionados por la Provincia desde que el Gobierno nacional decidió volver a publicarlos tras el “apagón estadístico” durante el kirchnerismo.

Las dudas llegaron a tal punto que el año pasado calculó su propio índice de pobreza. El disparador de la creación del llamado “Monitoreo de Condiciones de Vida” fue el dato del 40,5 por ciento de pobreza en el segundo semestre de 2016, considerado erróneo por la Provincia.

En números, en el Gran Córdoba había –al primer semestre de 2018–

466.890 personas por debajo de la línea de pobreza, de las cuales 84 mil eran indigentes, esto es, el 5,5 por ciento del total.

A nivel nacional, los datos de la encuesta del Indec dicen que la pobreza marcó un 27,3 por ciento, lo que se traduce en unos

11.150.000 pobres en todo el país. La indigencia, en tanto, se ubicó en 4,9 Al primer semestre de 2018, los pobres eran el 30,3%. En el promedio del país, el Indec determinó que la pobreza afecta al 27,3%. Son unas 11,1 millones de personas.

por ciento.

Un semestre bipolar

Hay que tener presente que el relevamiento publicado ayer promedia un primer trimestre positivo, en el que se produjo una suba de la actividad y del empleo, con un segundo tramo en el que el dólar aumentó un 50 por ciento (de 20 a

30 pesos), se disparó la inflación (al

30 por ciento interanual) y cayeron todos los indicadores productivos.

Esto significa que los datos de pobreza, tanto el nacional como el local, están “suavizados” por los valores positivos registrados entre enero y marzo.

En consecuencia, el fuerte deterioro de todas las variables económicas producido desde el segundo trimestre de este año anticipa un crecimiento de la cantidad de personas que caerán debajo del indicador que publica el Indec.

El propio Mauricio Macri reconoció ayer que “se va a tardar más” en alcanzar el objetivo de reducir la pobreza. “Marzo y septiembre (los meses en que se darán a conocer los índices del segundo semestre de 2018 y del primero del año que viene) también van a mostrar un retroceso”, admitió el Presidente.

Minutos antes, cuando comenzó el discurso que dio paralelamente con la publicación de los datos del organismo de estadísticas, Macri dijo: “No es una noticia fácil. Tenemos meses difíciles por delante”.

Variables complicadas

La pobreza se mide en la Argentina en función del costo de una canasta que incluye una serie de productos y servicios básicos. Si los ingresos de los hogares no alcanzan a cubrir esas necesidades, se los considera pobres.

En el caso de la indigencia, el parámetro es el valor de una canasta de alimentos.

Con la inflación y con la pérdida del poder de compra de los salarios, variables que comenzaron a acelerarse a medida que la crisis cambiaria se fue trasladando a los precios, será prácticamente inevitable que el número de pobres se engrose. Y hasta el propio Gobierno lo admite.

Hay que tener en cuenta también que la última medición no abarcó el incremento de precios producido desde julio. El IPC Córdoba, por ejemplo, marcó un 3,52 por ciento para ese mes y un 3,34 para agosto. Además, se espera no menos del seis por ciento para septiembre y se calcula que a fin de año la suba interanual de precios superará el 40 por ciento.

Sergio Tocalli, ministro de Desarrollo Social de Córdoba, reconoció ayer que “las cuestiones macroeconómicas, el proceso inflacionario y la crisis cambiaria” que se produjeron en los últimos meses generarán “situaciones de más pobreza”.

En este sentido, mencionó acciones que la Provincia está llevando a cabo para anticiparse. Por ejemplo, la extensión del monto invertido en programas sociales, de empleo y de boletos gratuitos. Según declaró el gobernador Juan Schiaretti, de los nueve mil millones de pesos previstos, se pasará a

12,5 mil millones para el período

2018-2019.