La Voz del Interior

Gimnasia profundizó la crisis xeneize

Cuando el partido parecía destinado a los penales, apareció Hurtado.

- Ana Dalmasso adalmasso@lavozdelin­terior.com.ar

Poco había hecho Gimnasia, pero con ese gol de Jan Hurtado a los 44 minutos del segundo tiempo terminó de sellar una semana durísima para Boca, tras la derrota en el superclási­co. Sin respuestas ni rebeldía. Así dejó Córdoba.

El partido arrancó bastante trabado y ninguno de los equipos podía hacer pie por el campo de juego mojado. Muchos resbalones en un accidentad­o inicio, con el Lobo presionand­o y saliendo rápi- do con Tijanovich y Gómez. Boca se hacía dueño de la pelota pero como en todo el semestre no encontró asociación. A los 12, Boca perdió a Benedetto por lesión y en su lugar entró Tevez. Perdió en peso ofensivo pero ganó en juego de conjunto.

Duró apenas 10 minutos hasta que el Lobo se metió en el partido y complicó. Silva y Guevgeozia­n hicieron un gran trabajo conteniend­o a los centrales y complicand­o con sus descargas. El armenio generó la más peligrosa, provocando la amonestaci­ón de Izquierdoz tras una falta al borde del área.

Boca quedó partido, con los cuatro de arriba esperando pelotazos Amonestado­s:

Estadio: Público: Árbitro: Suplentes:

o pases entre líneas que nunca llegaron. Flojos Cardona y Zárate en esa primera etapa, son conexión ni desequilib­rio. Pavón fue el que más intentó, picando en todas y no terminando siempre bien.

Tevez mostró una buena versión, opacó la labor de Zárate cuando ingresó y se hizo cargo del juego. Impreciso a veces, pero asumiendo el rol de referente. No ayudaron sus compañeros, pero volvió a mostrar que quiere jugar desde el arranque. Algo de Pablo Pérez y la presencia de Barrios para sostener al equipo desde atrás.

Gimnasia se fue quedando sin armas. Ya no pesaron arriba ni Silva ni Guevgeozia­n. Sólo le quedaba resistir y ver si agarraba mal parado a Boca en una contra. Ese momento llegó y desde la derecha vino el centro para Hurtado, que había reemplazad­o al armenio y casi no había tocado la pelota. Se conformaba el Lobo con los penales y casi del cielo llegó esa jugada aislada.

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(FACUNDO LUQUE) El Lobo festejó con Jan Carlos. Así se llama el venezolano Hurtado, quien convirtió el gol del triunfo de Gimnasia en el Kempes.

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