Quejas por subas retroactivas en las cuotas de los viajes de estudiantes
Defensa del Consumidor ya receptó entre 15 y 20 denuncias por cambios en las condiciones pactadas en los contratos. Algunas agencias pretenden ajustar las cuotas al nuevo tipo de cambio, incluso retroactivamente.
La disparada del dólar en los últimos meses está impactando de lleno en el turismo emisivo, y en ese nuevo escenario los viajes estudiantiles al exterior también están acusando el golpe. No sólo por una significativa baja en la demanda que ya registra el sector debido al encarecimiento de estos servicios, sino también por los problemas que están teniendo algunos colegios cordobeses con viajes ya pactados en 2017 y en 2018.
Según Ariel Juri, titular de la Dirección de Defensa del Consumidor de la Provincia de Córdoba, el área a su cargo ha recibido en las últimas semanas entre 15 y 20 presentaciones de padres de alumnos de distintas escuelas que denuncian cambios en las condiciones exigidas por las agencias. “Fundamentalmente, se trata de aumentos en las cuotas restantes de los contratos e, incluso, en ciertos casos, de la solicitud de pagos retroactivos en cuotas ya abonadas”, explicó Juri.
En algunos casos se trata de viajes previstos para este fin de año, y en otros para 2019. Por lo general, los viajes de egresados se pactan en contratos a dos años.
“Las empresas quieren volver a revisar los precios, y cobrar excedentes por las subas en los servicios derivadas del aumento del dólar”, señaló el funcionario provincial, quien aseguró que todos los casos presentados en Defensa del Consumidor están por ahora en etapa conciliatoria, sin que todavía alguno haya derivado en una sanción jurídica.
Juri afirmó que hay casos que se están resolviendo con la baja de algunos chicos de los viajes, y logrando la restitución del dinero ya abonado. En otros, se acuerdan aumentos en las cuotas menores que los pretendidos inicialmente por las agencias, aunque descartando cualquier tipo de ajuste retroactivo en los pagos.
Revisar los contratos
La mayoría de los conflictos se han generado con viajes a Cuba o a Brasil, destinos estudiantiles que en los últimos años han experimentado un fuerte crecimiento en desmedro de las opciones más tradicionales: Bariloche y Carlos Paz. Según estimaciones de los operadores turísticos, entre el 10 y el 15 por ciento de los egresados que realizan viajes de fin de curso optan por un destino extranjero.
Desde la Asociación Cordobesa de Agencias Viaje (Acav), su presidente, Gustavo Peralta, dijo desconocer que existieran problemas con este tipo de contratos, aunque reconoció que algunas empresas tienen intenciones de actualizar las cuotas debido al encarecimiento de los servicios turísticos al exterior.
“La posibilidad de ajuste de las cuotas depende de cada caso. Para poder hacerlo, esa opción debe estar especificada en el contrato, en el que se debe señalar que podrían variar en función del tipo de cambio”, dijo el titular de Acav.
En Córdoba, hay una decena de empresas dedicadas al turismo estudiantil, aunque también operan en el mercado local algunas agencias con casa matriz en Buenos Aires y en Rosario. Precisamente, la mayoría de los reclamos receptados en Defensa del Consumidor provienen de agencias radicadas en otras jurisdicciones.
“La ley 24.240 de Defensa del Consumidor establece claramente que no pueden cambiarse las condiciones de un contrato. Menos de manera retroactiva. Si hubiera alguna cláusula que prevé un ajuste en virtud de la suba del dólar, es necesario evaluar cada caso”, sostuvo Juri.
En ese sentido, Santiago Aramburu, abogado especialista en Derecho del Turismo, explicó que cuando un contrato ya pactó precios y formas de pago, no puede ser modificado. “Salvo que esté aclarado en el texto mismo, y especificado en qué situaciones puede hacerse”, indicó.
“La normativa relacionada con el turismo estudiantil no dispone en qué moneda deben pagarse los viajes. Pero las empresas deben utilizar un contrato modelo autorizado por la Secretaría de Turismo de la Nación; si utilizan otro, pueden ser sancionadas”, explicó Aramburu.
Desde la Dirección de Defensa del Consumidor, Juri recomendó a los padres hacer el reclamo correspondiente si las agencias pretenden cambiar las condiciones pactadas originalmente. “Hay que revisar los contratos, y determinar si no están en infracción con la ley 24.240. La información dada a los padres debe ser clara y precisa, sin modificar lo pactado en el momento de la firma”, insistió.