A los 70 años, se apagó el humor del Chango Rodríguez
A los 70 años murió Julio César “el Chango” Juárez. Colegas y amigos destacan la importancia del humorista cordobés, que marcó el rumbo a nuevas generaciones.
El humor cordobés perdió una referencia indiscutida. A sus 70 años, falleció Julio César “Chango” Juárez. El humorista, que tuvo una recaída luego del aneurisma que sufrió hace unas semanas, había cumplido años el 25 de septiembre. Estaba celebrando los 45 años de carrera.
“Al Chango lo conocí cuando tenía 16 años y él recién venía de Villa María. Bailarín de folklore, carismático, payasesco con sus movimientos histriónicos y sus caras únicas”, recuerda su colega y amigo “Mudo” Esperanza. Querido por sus compañeros de ruta, de Juárez todos resaltan su don de gran amigo. “Lo conocí personalmente hace cinco años, cuando en Carlos Paz nos juntamos los humoristas a homenajear sus 40 años de carrera. Y desde ahí creció la amistad. Era una gran persona, siempre alegre y sonriente. Tenía esa pose con los brazos abiertos que era todo un símbolo suyo. Cada humorista tiene un rasgo característico, y siempre lo voy a recordar arriba del escenario con los brazos abiertos como abrazando a todo el público”, describe Marcelo “el Coto”.
“Como persona, fue un gran amigo, un ser humano generoso, noble y con una sonrisa y una carcajada únicas. Bondadoso arriba y abajo del escenario. Lo que más siento es que se fue un amigo”, agrega Esperanza.
Además de su histrionismo y su capacidad para hacer reír, “el Chango” fue pieza clave en la construcción del humor local. “Marcó una gran etapa de la revista Hortensia y el humor de Córdoba, posicionándolo en el país. Fue conocido en toda argentina con memorables actuaciones en Jesús María y Cosquín”, cuenta “el Coto”.
“Como persona siempre fue de 10, buena onda, hemos compartido escenario varias veces en festivales. Era un referente del humor cordobés, nos ha dado a todos los que somos de esta generación posterior a la suya muchos tips”, suma Fernando “el Flaco” Pailos.
Jorge Tissera también mostró su dolor. “Córdoba se queda sin uno de los grandes referentes del humor de la vieja escuela. Justo estábamos preparando algo para trabajar en la temporada de verano en el teatro Zorba de Carlos Paz y en Buenos Aires”.
Referencia para varios humoristas, su paso ha dejado una huella en el género. “Le deja al humor cordobés una tristeza enorme y a su vez un prestigioso legado por lo hecho y una obra magnífica en momentos clave como las décadas de 1970 y 1980, cuando el humor cordobés se estaba posicionando. Su camino marca el rumbo a varios que venimos por atrás”, dice “el Coto”. “Fue una marca registrada de este humor cordobés junto al ‘Sapito’ Cativa. Justo estábamos dando en las escuelas de Carlos Paz talleres de humor cordobés, para que el humor local no muera, eso es lo último que estaba haciendo, esa es la marca que deja”, cuenta “Mudo” Esperanza.
“El Chango” se había presentado en la pasada edición del Festival Pensar con Humor con el colectivo Humoristas Amuchados: “En febrero formamos un grupo denominado así en el que nos unimos para trabajar por y para el humor de Córdoba, y así fortalecer nuestras carreras individuales. En el colectivo estamos un poco tristes porque este año se nos han ido Lucho ‘Petete’ Ávila y el Chango”, cuenta Marcelo Coto.
El Flaco Pailos cierra: “Estamos tristes, ‘el Chango’ se fue de gira”.
“EL CHANGO” LE DEJA AL HUMOR CORDOBÉS UNA TRISTEZA ENORME... SU CAMINO MARCA EL RUMBO A VARIOS QUE VENIMOS POR ATRÁS.
Marcelo “el Coto”