Se olvidaron de un preso encerrado en 1971
Por orden de un juez federal, quedó en el neuro de Oliva.
El caso. En 1971, cuando tenía 22 años, Miguel Arroyo quedó detenido por el supuesto delito de “lesiones leves” (algo excarcelable) a cargo de la Justicia federal de Bell Ville. Por un padecimiento psiquiátrico, fue alojado en el neuro de Oliva. Sin embargo, a la luz de los hechos, las autoridades se olvidaron de él. Para peor, en una quema de expedientes en Bell Ville se perdió su caso. Todo se descubrió ahora por el interés de una asistente social del neuro.