Londra les gana a los Stones
El cordobés es el artista argentino más escuchado en el mundo en Spotify.
Ayer se cumplió un año desde que el cordobés Paulo Londra subió a YouTube el video del tema Condenado para el millón. 365 días después, son más de 147 millones las reproducciones que cosecha la canción con la que el trapero local comenzaba una carrera tan meteórica como impresionante.
Es que estando en la misma ciudad que él, a veces se puede perder dimensión de que el joven artista se ha convertido en un gran fenómeno latino de este año.
Si hiciese falta contrastar esta afirmación, los números que cosecha en Spotify, la influyente plataforma de streaming de música, son contundentes: según difundió en una reciente gacetilla, Paulo Londra tiene más de 13 millones de oyentes mensuales.
En días en que los fans se cuentan por toneladas, estos números podrían no impresionar, pero basta hacer un rápido repaso por la cantidad de oyentes que tienen las principales bandas y artistas del mundo –y ni hablar de los locales– para entender que estamos frente a un fenómeno de dimensiones descomunales.
Ubicado en el puesto 150 del mundo, tabla liderada por Ariana Grande, Londra supera en oyentes, por ejemplo, a los mismísimos Rolling Stones. Sus Majestades Satánicas tienen poco más de 12 millones, y están debajo del cordobés en la cifra.
Si la comparación se lleva al plano nacional (y también en artistas cordobeses), la diferencia numérica es directamente abismal. Para entender un poco cuán importantes son los números de Londra, el contraste con una primera figura nacional como Abel Pintos (quien tiene 1.800.000 oyentes mensuales) o Charly García (con 1.100.000 oyentes), muestra que ni un artista de convocatoria masiva en Argentina puede arañar un 20 por ciento de sus seguidores. Aunque pueda resultar odiosa, la comparación con sus coterráneos cordobeses agiganta aún más el año del rapero. Si se ve que Carlos la Mona Jiménez tiene 61 mil seguidores en Spotify, Ulises poco más de 500 mil y Londra está arriba de los 2.300.000, el ascenso en este año del joven resulta impactante.
Otra curiosidad es el posicionamiento latinoamericano del artista. Si bien el despegue fue desde Córdoba, hoy su música se consume mucho más en el exterior. Así, el ranking de ciudades que más escucha sus canciones tiene a Santiago de Chile en primer lugar, a la Ciudad de México en segundo, y recién a Buenos Aires en tercer puesto.
Como particularidad, Madrid se posiciona en el cuarto lugar, aventurando que los límites fronterizos aún están difusos y que, pensando en el furor de la música latina en el planeta, hay una gran posibilidad de que la onda se expanda por el Viejo Continente.