La Voz del Interior

Todo muy lindo, pero ¿y la inflación?

- Juan Turello Más y menos jturello@lavozdelin­terior.com.ar

Todo muy lindo en la propaganda política. Mauricio Macri habla de sus logros, pero no menciona la economía. Alberto Fernández promete volver a poner de pie a la Argentina, aunque no explica ninguna medida. Roberto Lavagna tiene el mejor mensaje conceptual, pero esconde sus recetas. La izquierda no cree en la empresa privada pese al camino inverso que recorren China y Rusia, referentes de su credo.

Todo muy lindo, pero nadie habla con claridad sobre cómo derrotar la inflación, el fenómeno que devora desde hace más de 50 años la capacidad de crecimient­o que ofrecen el capital humano y los recursos naturales. Y es, hoy, la principal preocupaci­ón de los argentinos.

El mundo ya no discute la inflación. El desvelo es cómo el Estado puede ayudar a corregir el abismo cada vez más grande entre ricos y pobres, y cómo afrontar los desafíos que plantean la automatiza­ción y la robotizaci­ón en el trabajo.

Los candidatos no hablan sobre cómo reducir la inflación a menos de un dígito en pocos años. Esa era la promesa de Macri en la campaña de 2015. Ahora, reconoce que subestimó ese desafío, aunque decidió atacar la cuestión de fondo: el excesivo déficit del Estado, que provocó un fuerte aumento de la deuda.

Cuando se cerró la ventanilla del crédito internacio­nal, el Gobierno debió acudir al Fondo Monetario Internacio­nal (FMI) para evitar un nuevo default. La oposición no quiere las recetas del Fondo, pero no dice cómo hará para crecer, generar dólares y cancelar los compromiso­s externos.

El Gobierno festejó la tercera baja consecutiv­a de los precios en junio a 2,7 por ciento, que es ¡la inflación que prevé Chile para este año! La desacelera­ción es para valorar, pero se dio en un contexto de estabilida­d cambiaria por la oferta de dólares de una cosecha récord: 147 millones de toneladas; con las tarifas públicas planchadas y con una caída del consumo, que las consultora­s estimaron en 7,9 por ciento en alimentos, en bebidas y en productos de tocador y de limpieza.

Los participan­tes del relevamien­to de expectativ­as de mercado (REM) del Banco Central estiman una inflación anual de 40 por ciento. Para julio, calculan 2,4 por ciento. En la encuesta participar­on 33 consultora­s, 14 entidades financiera­s y siete analistas extranjero­s.

Para 2020, la expectativ­a es de 27 por ciento. Este año la economía caería 1,4 por ciento, y anticipan un crecimient­o de 2,2 para el próximo. El ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, es más optimista: caída de 0,8 para 2019 y expansión de 3,5 en 2020.

¿Y el dólar?

Los participan­tes del REM prevén un dólar a 44,10 pesos en julio y a 50,20 pesos para diciembre próximo.

Ya quedan pocos economista­s que pronostiqu­en un estallido, como sucedía dos meses atrás. El Banco Central tiene comprados dólares a futuro por siete mil millones, con lo cual venderá esas posiciones –si es necesario– para desarmar cualquier corrida. La divisa seguirá subiendo, aunque a tramos más lentos, por la incertidum­bre política.

Los técnicos del FMI expusieron en el último informe las dudas que les genera el proceso electoral. Dicen que Macri, en un eventual segundo mandato, carecería del apoyo legislativ­o necesario para lograr las reformas impositiva, laboral y previsiona­l que necesita el país para salir de su estancamie­nto.

Alberto Fernández ya le anticipó a la CGT que “no habrá reforma laboral”, lo que podría dejar fuera del mercado laboral a millones de jóvenes y generará conflictos con las empresas y las posiciones que se crearon en los últimos 40 años, de cuando datan los actuales convenios. Sin cambios laborales, no hay reforma previsiona­l factible. Para corregir el déficit, se necesitan más aportantes.

El problema es que los candidatos no dicen cómo atacarán la piedra basal de la macroecono­mía, que es la estabilida­d, ni qué harán para corregir el déficit crónico del Estado.

Todo muy lindo con la propaganda, pero faltan propuestas de fondo.

 ??  ??
 ??  ?? Precios. Nadie dice cómo bajarlos.
Precios. Nadie dice cómo bajarlos.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina