Indecisos: la apuesta de Macri y de Fernández
En la última semana de campaña, los candidatos vendrán a Córdoba para tratar de convencerlos.
Auna semana del cierre de la campaña electoral para las Paso del 11 de agosto, los principales candidatos presidenciales priorizan Córdoba, apuntando sus propuestas al electorado independiente y a los indecisos.
Si bien todas las encuestas marcan una fuerte polarización entre el macrismo y el cristinismo, hay entre un cinco y un ocho por ciento de cordobeses que aún no tendrían decidido su voto. Allí apuntan las estrategias de los espacios políticos más importantes.
Mauricio Macri (Juntos por el Cambio) y Alberto Fernández (Frente de Todos) saben que tienen un piso electoral en la provincia – el segundo distrito electoral del país– y tratarán de ampliar esa cosecha de votos en la última semana de campaña.
Alberto Fernández volverá mañana a Córdoba, y el Presidente lo hará el próximo miércoles.
Como lo hizo en 2015 y 2017, Macri cerrará la campaña en el interior, en Córdoba capital. El acto será en la tarde del miércoles en la Plaza de la Música.
No será la única actividad de la fórmula presidencial de Juntos por el Cambio. Un día antes, el candidato a vice, Miguel Pichetto, vendrá a Córdoba para realizar distintas actividades.
Inaugurará un local partidario propio del peronismo republicano y visitará un conocido frigorífico en Río Segundo. Pero la principal actividad del senador nacional será la reunión con peronistas cordobeses para tratar de arrimar votos al macrismo.
Según las encuestas que manejan en la Casa Rosada, para las Paso de agosto, Juntos por el Cambio está en alrededor del 48 por ciento de los votos en Córdoba.
Los macristas y radicales confían en que ese caudal electoral podría ampliarse para la primera vuelta electoral del 27 de octubre. Creen que una buena porción de los votantes en las primarias de Roberto Lavagna, José Luis Espert y Juan José Gómez Centurión se inclinarán por el Presidente en octubre.
“Se trata de votantes muy pensantes que el 11 de agosto votarán por sus preferencias, pero en octubre lo harán por Macri, cuando se convenzan de que elegir otra opción será funcional a los Fernández”, razonó un dirigente radical del equipo de Mario Negri.
En territorios adversos
Por su parte, Alberto Fernández volverá mañana a Córdoba. A diferencia de los sucedido hace 10 días, cuando visitó Villa María y Villa Carlos Paz, dos ciudades en las cuales tuvo el apoyo de importantes dirigentes del PJ, en esta oportunidad el candidato presidencial del Frente de Todos pisará territorios en los cuales Macri es fuerte electoralmente.
La estrategia del candidato cristinista es ir a buscar votos de los indecisos y “desilusionados” con el Gobierno nacional a ciudades como Marcos Juárez, Bell Ville, General Deheza y Río Cuarto, donde la entonces alianza Cambiemos hizo una gran diferencia en 2015.
La agenda de actividades de Alberto Fernández fue diagramada por dirigentes del peronismo cordobés que apoyan su candidatura, pero que también militan la boleta “corta” que impulsa el gobernador Juan Schiaretti.
El senador Carlos Caserio es uno de los organizadores de la última gira por Córdoba del postulante que impuso Cristina Fernández.
Aunque hasta anoche no se conocían los detalles de la gira, Alberto Fernández visitará mañana Marcos Juárez, Bell Ville y terminará la jornada con una cena en Leones, donde gobiernan los K.
El sábado, irá a Río Cuarto. Encabezará un encuentro en la Universidad Nacional. Las versiones indican que se hará un tiempo en su apretada agenda para visitar General Deheza, donde sería recibido por el empresario Roberto Urquía, uno de los titulares de Aceitera General Deheza (AGD).
Como lo viene haciendo en los últimos días, Alberto Fernández reiterará algunas promesas de campaña, como aumentar los haberes de los jubilados, medicamentos gratuitos para la tercera edad y algunos compromisos concretos para el sector agropecuario.
Desde el entorno del candidato presidencial admiten que Macri le sacará una amplia ventaja en Córdoba, pero el objetivo es achicar esa diferencia.
Los números del Frente de Todos indican que hoy la fórmula presidencial estaría entre los 25 y los 27 puntos. Para los cristinistas, llegar al 30 por ciento en las Paso sería un triunfo, más allá de que Macri ronde el 50 por ciento.
Schiaretti pone la cara
Con una polarización que cada vez es más marcada en Córdoba y en el resto del país, el PJ cordobés busca movilizar a su aceitado aparato en respaldo a la boleta corta que encabeza el riocuartense Carlos Gutiérrez.
Si bien los números de los sondeos no son los que se esperaban, en el Centro Cívico creen que las encuestas no pueden pronosticar el peso del aparato del PJ.
En los últimas horas, el gobernador Schiaretti salió a ponerle el cuerpo a la campaña, mientras sus dirigentes más cercanos mantienen contactos permanentes con los 282 intendentes peronistas para que trabajen la lista de Hacemos por Córdoba.
El resto de las fuerzas también preparan actos de cierre en la provincia. La fórmula Roberto Lavagna-Juan Manuel Urtubey (Consenso Federal) vendría el martes o miércoles para hacer la última visita a Córdoba.
Más allá de la extrema polarización que marcan las encuestas, todos los candidatos creen que hay lugar para alcanzar sus objetivos en las Paso.