La Voz del Interior

Investigan dos secuestros exprés cometidos el mismo día

En siete horas, dos ataques similares en la Capital: una pareja fue subida a su auto en Alto Alberdi y liberada en villa Los Galpones. En Alta Córdoba ocurrió el segundo caso. Un comerciant­e, dejado libre en un hipermerca­do, y su familia fueron las vícti

- Claudio Gleser cgleser@lavozdelin­terior.com.ar

Los investigad­ores no dejan de analizar filmacione­s, de recabar testimonio­s y de buscar datos entre informante­s para intentar dar con los delincuent­es que, con casi siete horas de diferencia, cometieron dos asaltos de la modalidad “entraderas” y que derivaron en secuestros de tipo exprés, incluso con víctimas golpeadas, en la ciudad de Córdoba.

Por un lado, un comerciant­e permaneció cautivo durante media hora a manos de una banda de ladrones, en la mañana de ayer, mientras otra parte del grupo asaltaba a su familia en barrio Alta Córdoba. Terminó encerrado y maniatado en el baúl de su auto.

Por otro lado, en la madrugada, una mujer embarazada y su novio fueron víctimas de otro caso exprés en Alto Alberdi cuando guardaban el auto. Fueron liberados, un rato después, en la villa Los Galpones, de Alta Córdoba.

No hay detenidos por ninguno de los casos. Desde la Policía y desde la Justicia provincial negaron que se tratara de secuestros extorsivos, al tiempo que aclararon que son asaltos violentos en los que las víctimas, aparenteme­nte, son llevadas como “escudos humanos” por si aparece la Policía.

Los casos se suman al del martes por la mañana, cuando delincuent­es con gorras y camperas de la Policía Federal sorprendie­ron a una mujer que sacaba su auto (con sus hijas) y, con el ardid de que se trataba de un allanamien­to, la llevaron hasta su casa –a pocas cua- dras– para golpear y asaltar a su esposo. Ocurrió en Parque Capital, al sur de la ciudad.

El hombre asaltado en Alta Córdoba tiene chapas de taxi. El atacado en Parque Capital tiene remises

en Buenos Aires.

Para los investigad­ores, se trataría de varias bandas.

Asaltar a vecinos que abordan o se bajan de vehículos es una metodologí­a reiterada. Lo que llama la atención ahora es que los ladrones se llevan las víctimas consigo.

De madrugada

El primer caso ocurrido ayer se registró a la 1, cuando ladrones abordaron a una pareja (ella está embarazada) en Ángel Fausto Ávalos y avenida Duarte Quirós, en Alto Alberdi, a pocas cuadras del Nuevocentr­o Shopping.

“Fue una entradera. La pareja estaba guardando el auto en una cochera y los abordaron dos ladrones, quienes se llevaron a las víctimas con ellos”, confirmó a La Voz el fiscal Gustavo Dalma.

Mediante amenazas y maltratos, los ladrones arrancaron el Volkswagen Voyage oscuro con las víctimas ubicadas en la parte trasera. Se cree que parte de la banda se movilizaba en otro rodado. Nadie entró en la casa de las víctimas.

Ningún vecino consultado ayer vio el robo. Eso sí: todos se quejaron de los asaltos callejeros.

La pareja fue liberada en la villa Los Galpones, en Alta Córdoba. “Están bien”, indicaron fuentes judiciales, quienes señalaron que los ladrones escaparon con el rodado y con otras pertenenci­as.

En Alta Córdoba, por su parte, varios vecinos se quejaban ayer por los robos y los ladrones que se ocultan en ese asentamien­to.

El otro exprés

“Mis padres están bien, un poco golpeados y asustados, pero bien. Fue algo muy feo. Nunca nos había pasado”, señalaba ayer Pía Carnero, en la puerta de la casa familiar, en Urquiza 2244, Alta Córdoba. A su lado, había un policía de custodia; más atrás, un carpintero arreglaba la puerta de calle, reventada a patadas por la banda.

La pesadilla de los Carnero arrancó a las 7.45.

A esa hora, Raúl Carnero (65, dueño de chapas de taxi) salió de casa, caminó cinco metros y sacó dos Peugeot 208 de color gris de una cochera. Uno era suyo. Iba a llevar a su esposa, Graciela, al médico

Ladrones encapuchad­os se metieron en la cochera, lo golpearon y lo hicieron entrar al coche. La zona es transitada.

La banda portaba pistolas y buscaba dinero. “Nunca lo llamaron por su nombre. Por eso, no creemos que se haya tratado de algo personal. De hecho, no tenemos plata”, relató Pía.

Carnero padre fue atado con alambres y metido en la parte trasera. Lo golpearon en el rostro. Mientras los dos autos eran sustraídos, el resto de la banda (que se habría movilizado en motos) quiso entrar a la casa. Sin llaves, reventaron la puerta.

Vestían, hablaban y hasta olían bien. Usaban perfume y tapaban sus rostros. Exigían dinero.

La esposa de Carnero, su otra hija y una abuela fueron encañonada­s. Salvo la jubilada, las dos mujeres terminaron maniatadas. Un hijo varón se escondió en un rincón de la casa. A todo esto, don Carnero era “paseado”.

“Nunca pidieron plata de rescate por mi papá. Sí querían la plata de la casa, pero tampoco había”, remarcó Pía. La banda se hizo de 20 mil pesos y de joyas.

Un monto mínimo para semejante golpe delictivo. “O les falló el dato o se equivocaro­n de víctimas”, comentó un comisario.

De pronto, la banda en la casa gritó: “¡Vamos! ¡Vamos!”.

Los dos Peugeot rumbearon juntos hacia barrio General Paz. Los delincuent­es no paraban de hablar por celular. A la altura del híper Libertad, uno de los autos entró en la playa. Allí dejaron a Carnero, encerrado y maniatado.

La Policía, que ya había sido alertada sobre el asalto en la casa de Alta Córdoba, no sabía dónde se encontraba el cautivo. Todo se descubrió porque un empleado del centro comercial percibió gritos.

 ??  ?? Después. Pía Carnero relata cómo asaltaron a su familia en Alta Córdoba.
Después. Pía Carnero relata cómo asaltaron a su familia en Alta Córdoba.
 ??  ??
 ?? (JAVIER FERREYRA) ?? Primero. Una pareja fue abordada cuando guardaba el auto en Alto Alberdi.
(JAVIER FERREYRA) Primero. Una pareja fue abordada cuando guardaba el auto en Alto Alberdi.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina