Alberto y Cristina encabezaron acto masivo en Rosario
Un llamado a sus votantes para disuadir al resto de los argentinos a votarlos, incluso a los que hace cuatro años lo hicieron por el hoy oficialismo. Un aviso sobre las dificultades para “poner en pie a la Argentina” si son gobierno en diciembre.
Tales fueron los señalamientos centrales de los discursos con los que los candidatos a presidente, Alberto Fernández, y a vice, Cristina Fernández, cerraron la tarde de ayer la campaña electoral de cara a las Paso del Frente de Todos, ante una multitud, en el parque que rodea al emblemático Monumento Nacional a la Bandera, a la vera del Paraná rosarino.
Los Fernández estuvieron acompañados en el palco por gobernadores, gobernadores electos y candidatos a gobernador del frente que encabeza el peronismo. Un total de 19, encabezados por el dueño de casa por asumir, Omar Perotti, entre los que el aspirante bonaerense, Axel Kicillof, fue largamente el más ovacionado. Más el jefe del Frente Renovador, Sergio, en un palco adjunto: “Sergio anda por ahí”, dijo Cristina cuando refirió las presencias para mostrar la fortaleza de la coalición.
Los únicos gobernadores peronistas ausentes fueron el cordobés Juan Schiaretti, quien decidió no apoyar a candidato presidencial alguno, y el salteño Juan Urtubey, compañero de fórmula de Roberto Lavagna.
Dos horas antes, en la Facultad de Derechos de la Universidad del Litoral, Alberto había firmado una “carta compromiso” con los gobernadores y los que pueden llegar a serlo, en pos de construir una “auténtica Argentina federal”.
Es decir: en cuestión de horas, en el día del cierre, y con 20 cuadras de diferencia (entre la facultad y el Monumento a la Bandera), el aspirante del Frente de Todos exhibió poder territorial, con un acto de vuelo institucional y popular, con la multitud que lo escuchó y lo vivó, tanto, o casi tanto, como a Cristina, que lo precedió en el discurso de un acto breve, de menos de 40 minutos.
Los alrededor de 60 mil metros cuadrados del parque que mira a la Estación Fluvial de la ciudad que fueron habilitados (unos 200 por 300 metros) estuvieron colmados. Agitando banderitas argentinas de tela y de papel, hicieron el aguante durante la larga e inexplicable espera (empezó dos horas más tarde) con cánticos ya clásicos: “Oh, vamos a volver”; “Néstor no se murió”, y otro nuevo de las últimas semanas: “Se siente, Alberto presidente”. “Se siente y se necesita, que es mucho mejor”, corrigió Cristina a la multitud.
Los discursos fueron sorprendentemente breves, más por tratarse de Cristina, quien así buscó dejar el lugar estelar a su exjefe de Gabinete, hoy el presidenciable. “Vamos a volver a abrir las fábricas y a dar trabajo”, cerró Alberto sus 15 minutos, después de afirmar que la demanda que más escuchó en la campaña fue por trabajo.
El candidato tuvo palabras de agradecimiento. Primero, a Cristina, por “generosidad, grandeza y visión”, por haber dado un paso al costado cuando lo propuso el 18 de mayo pasado; después a los argentinos, que votarán por Todos; y finalmente, a los gobernadores: “Van a ser parte de la Argentina que viene. Con Cristina, con estos gobernadores, sabemos qué intereses representamos; entre los que invierten y entre los que especulan, votamos por los que invierten y dan trabajo. Me quedo con el compromiso de construir una Argentina federal, que pensemos desde el interior”.
Antes de cerrar con el compromiso de que “no los voy a defraudar; y si me ven claudicar, salgan a la calle, recuérdenme que les estoy fallando”, el candidato del Frente de Todos aseguró, frente a quienes anticipan un enfrentamiento interno en caso de ser gobierno: “Están todos muy preocupados por cómo nos vamos a llevar con Cristina. ¡Nunca más me voy a pelear con Cristina porque vamos a hacer la Argentina que todos ustedes merecen!”.
También replicó a los que lo acusan de hablar sólo de economía porque es lo más conveniente en términos electorales: “No, yo hablo de valores. Qué sociedad podemos tener si nos olvidamos de nuestros abuelos, si vemos como todos los días caen fuentes de trabajo y no nos preocupamos. Esos son valores”. Y remató: “Vamos a poner de pie a la Argentina, como lo hicimos con Néstor en 2003”.
Por su parte, la expresidenta renovó sus críticas a la gestión de Mauricio Macri y reveló que cuando el Gobierno “decidió endeudarnos con el FMI a todos los argentinos” tomó la iniciativa con sus hoy socios políticos porque “era necesario reconstruir la unidad de las fuerzas nacionales, populares y democráticas”.
Enseguida, remarcó que desde diciembre la tarea “va a ser muy difícil”, aunque se mostró “segura” de que Alberto Fernández “va a desarrollar una tarea espléndida, como lo hizo cuando lo acompaño a Néstor (Kirchner)” como jefe de Gabinete.
Alberto Fernández, candidato a presidente por el Frente de Todos
NECESITAMOS UNIR ESFUERZOS PARA DEJAR ATRÁS ESTO TAN FEO QUE ESTAMOS VIVIENDO. Cristina Fernández, candidata a vicepresidenta por el Frente de Todos
Alberto Fernández, sin Cristina, pero con Massa.
Alberto Fernández, candidato presidencial del Frente de Todos, cerrará esta tarde en Córdoba la campaña de su sector político. El postulante llegará acompañado por Sergio Massa, pero sin Cristina Fernández, quien estuvo ayer en Rosario. Según indicaron los organizadores del acto en Córdoba, esperan más de 10 mil personas. Está previsto que Fernández cierre la convocatoria, alrededor de las 19. Será un acto netamente cristinista. Los dirigentes peronistas cordobeses que apoyan la fórmula de los Fernández no estarán en el Orfeo, ya que ellos también impulsan la boleta corta de Hacemos por Córdoba para el tramo de diputados nacionales.