Argentina, el país en el que un día parece un año
Describir la jornada de ayer y desentrañar las claves de lo que pasó durante todo el día y de lo que puede pasar en adelante nos llevan las 16 primeras páginas de esta edición.
La conmoción que vive nuestro país, esta vez a partir de la abultada derrota del oficialismo en las elecciones primarias del pasado domingo, obliga a un abordaje integral y a una riqueza de análisis para ofrecer la mejor información posible mientras los ciudadanos observan cómo pasan las horas, las cotizaciones y las remarcaciones. Otra vez.
Ayer fue el presidente Mauricio Macri el que abrió la jornada con
un mensaje autocrítico y con el anuncio de un paquete de medidas de alivio económico para la clase media, cuando los mercados estaban a punto de abrir.
Para agregar complejidad al asunto, no se trataba sólo de desmenuzar punto por punto lo que el Gobierno hará para intentar recuperar la confianza del electorado. También había mucho para “leer” en el tono mesurado y conciliador del mensaje del mandatario, pedido de disculpas incluido, muy distinto del de las crispadas palabras del lunes poselectoral.
Más tarde, el Presidente tomó por fin el teléfono y marcó el número de Alberto Fernández, ganador de los comicios del domingo, y allí se abrió otro frente de análisis. ¿Qué se dijeron? ¿En qué tono lo hicieron? ¿Se puede considerar diálogo político o palabras obligadas por las circunstancias? ¿Cómo impactará en los mercados?
Eso era ya bastante, pero la intensidad del miércoles no mermó: luego fue Fernández el que habló para dar su versión de la charla y su visión sobre las medidas anunciadas por el Gobierno.
Pero eso no fue todo. Tampoco faltó el factor externo (¡como si lo necesitáramos!), con el sacudón que sufrieron las bolsas de todo el mundo ante malas noticias en el desempeño económico de China y de distintos países europeos. Entonces hubo que dirigir la mirada a las acciones, a las bolsas, al dólar y al riesgo país, que ya roza los 2.000 puntos básicos.
LA CONMOCIÓN QUE VIVE NUESTRO PAÍS A PARTIR DE LA ABULTADA DERROTA DEL OFICIALISMO EN LAS ELECCIONES OBLIGA A UN ABORDAJE INTEGRAL.