Empresas municipales, con pocos datos públicos
En el portal de Gobierno Abierto hay información sobre Tamse, Crese y Esop. También está la documentación y normativa de todas las licitaciones del municipio.
La Municipalidad de Córdoba publicó en el portal de Gobierno Abierto los datos sobre las empresas y entes que son de su propiedad: Tamse, Crese y Esop. Sin embargo, en dos de los casos, la información es difusa e incompleta. La acción se toma en el marco de la transición entre el gobierno de Ramón Mestre y Martín Llaryora, en la que el peronista abandonó la comisión denunciando falta de informes sobre áreas sensibles.
Sólo en el caso de Córdoba Recicla Sociedad del Estado (Crese), se detalla punto por punto el estado de la empresa que se encuentra sin empleados y con un solo servicio a cargo, que se presta tercerizado: el de la recolección de patógenos de los centros de salud municipales.
Se detallan la liquidación de sus bienes y los juicios que tiene vigente. La mayoría son por siniestros viales que tienen más de ocho años. Sin embargo, aparece el de
Guía Laboral, que tuvo su capítulo de escándalo a principios de la gestión de Mestre y que implicó el ingreso de más de 100 trabajadores eventuales al servicio de recolección de la ciudad.
Es un juicio por unos 15 millones de pesos que se encuentra en el Tribunal Superior de Justicia.
Distinto es el caso del Ente de Servicios y Obras Públicas (Esop), que tiene a su cargo el barrido de la ciudad y el predio de disposición final. El informe que se publicó es de apenas tres carillas, en el que se cuenta una breve historia y que tiene 1.182 empleados.
Sin embargo, no se especifica demasiado en este rubro que tiene varios capítulos recientes polémicos relacionados con nombramientos del Surrbac, el sindicato de recolectores cuyos principales dirigentes están detenidos en la Cárcel de Bouwer.
Se indica cuánto equipamiento tiene y las obras que licitó: el nudo vial de plaza España y el mejoramiento barrial de Villa El Libertador, que cuenta con financiamiento ya cerrado del Banco Internacional de Reconstrucción y
Fomento y que pagará la Nación.
Pero no hay detalles sobre el estado financiero, deudas o juicios en su contra.
Lo mismo sucede con la estatal de transporte Tamse. Si bien se colgó un informe extenso, no hay detalle sobre la flota que posee para prestar servicios ni sobre las deudas que debe afrontar, o sobre las gestiones que deberían haberse realizado para cobrar subsidios.
El informe es un catálogo de elementos con los que cuenta cada área de la empresa: bases, catenarias y repuestos.