La Voz del Interior

Ciudadanos. Alejandra Beresovsky explica por qué la perspectiv­a de la salud es esencial.

- Alejandra Beresovsky Agendas cruzadas aberesovsk­y@lavozdelin­terior.com.ar

La Organizaci­ón Mundial de la Salud (OMS) acaba de publicar los desafíos sanitarios para los próximos 10 años. Y lo ha hecho no sin preocupaci­ón.

Para el organismo internacio­nal, 2030, el plazo para el cumplimien­to de los denominado­s “objetivos de desarrollo sostenible” (ODS) está demasiado cerca. Por eso ha llamado a los próximos 10 años como “la década de la acción”.

Los argumentos para convencer a los gobiernos para que actúen de manera más efectiva para el logro de esas metas intentan sensibiliz­ar sobre el impacto económico de no cumplirlas.

Es curioso que sea necesario explicar que no procurar una vida saludable se traduce en más costos del sistema de atención y en menos ingresos por productivi­dad.

“Todos los desafíos en esta lista requieren una respuesta de algo más que el sector de la salud”, escribió el director general de la

OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesu­s.

“Tenemos que darnos cuenta de que la salud es una inversión en el futuro”, añadió. Y graficó con un ejemplo contundent­e: “Los países invierten mucho en proteger a su gente de los ataques terrorista­s, pero no en contra del ataque de un virus, que podría ser mucho más mortal y mucho más dañino económica y socialment­e”. “Una pandemia podría poner de rodillas a economías y a naciones. Por eso la seguridad de la salud no puede ser un asunto sólo de los ministerio­s de Salud”, completó.

Alineación

Días atrás, la Argentina dejó claro que muchas veces las áreas de gobierno no trabajan alineadas cuando se incluyó en el programa de Precios Cuidados productos poco saludables, incluidas gaseosas con azúcar.

El mensaje de la OMS es otra invitación a cambiar el lente o, en otras palabras, a pensar las medidas económicas en términos de salud y las medidas de salud en términos económicos. Muchas acciones, desde abrir calles hasta definir la composició­n de la canasta de productos para medir la inflación, repercuten en la calidad de vida de la población. A su vez –hay que insistir–, la calidad de vida de la población tiene implicanci­as en la producción y en la generación de recursos.

Argentina debe pensar, fundamenta­lmente, en el efecto de sus medidas puertas adentro. Pero otros países, los considerad­os más poderosos, que interviene­n en otras sociedades directa o indirectam­ente, también deben pensar en el impacto sanitario mundial de cada actuación.

“El costo de no hacer nada es uno que no podemos pagar. Los gobiernos, las comunidade­s y las agencias internacio­nales deben trabajar juntos para lograr estos objetivos críticos”, sugirió Ghebreyesu­s.

“No hay atajos para un mundo más saludable. 2030 se acerca rápidament­e y debemos responsabi­lizar a nuestros líderes por sus compromiso­s”, concluyó el directivo.

Pero si el desafío global es grande, no menos ambicioso es asumir cambios de manera individual. Todos podemos hacer cosas que repercutan, en el corto, mediano y largo plazos, en el sistema sanitario general. Apostar al autocuidad­o y a la prevención es una de ellas.

Analizar cada uno de nuestros comportami­entos con la lente de la salud es, por lo tanto, un ejercicio que nos correspond­e a todos.

OTROS PAÍSES, LOS CONSIDERAD­OS MÁS PODEROSOS, TAMBIÉN DEBEN PENSAR EN EL IMPACTO MUNDIAL DE CADA ACTUACIÓN.

 ??  ?? Tedros Adhanom Ghebreyesu­s. El director general de la Organizaci­ón Mundial de la Salud expuso argumentos que exceden lo sanitario.
Tedros Adhanom Ghebreyesu­s. El director general de la Organizaci­ón Mundial de la Salud expuso argumentos que exceden lo sanitario.
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina