Syrah. 10 recomendados de una cepa intensa
En el mes en el que se destaca el Día Mundial del Syrah, es significativo actualizar los atractivos de esta cepa que llegó a ser muy importante en Argentina.
El 16 de febrero se celebra el Día Mundial del Syrah, que puede ampliarse al “mes del syrah”, ya que es una cepa muy respetada en Francia. En el norte del río Ródano, forma base esencial de los vinos de Hermitage, de los más aristocráticos.
En Argentina se la conoció como balsemina durante años y también solía aparecer en las etiquetas como shiraz, y llegó a ser una variedad ilustre en el consumo nacional. Una cierta deriva en los últimos años la fue dejando ensombrecida al lado de las tradicionales y de las emergentes, pero el syrah sigue teniendo el pleno derecho a estar entre las grandes.
Conecta muy bien con el asado y con los guisos, o sea que es para tener en cuenta si el plan culinario deviene en algo intenso.
Gran Syrah Finca Las Moras, 2014, San Juan, $ 2.200.
Característico de esta zona de Cuyo, el syrah sanjuanino es emblemático y en esta botella se conjugan los tres grandes valles vitícolas: Zonda, Tulum y Pedernal, ofreciendo un voluptuoso y asombroso vino, estructurado, profundo, lleno de matices, como si cada valle aportara un toque distintivo.
Rutini syrah, 2016, Mendoza, $ 1.415.
La precisión de la enología de Mariano Di Paola es estremecedoramente vivaz. El prestigio de Rutini no se lo confiere sólo el tiempo sino también el estilo cálido y equilibrado en lo que hacen. De entrada vibrante, después se arremolinan sabores en la boca que dejan sobrecogido a cualquiera. Es un syrah impecable en estructura y honradez, tanto aromática como gustativa. Impecable elección para carnes bien jugosas.
Laborum Syrah, bodega El Porvenir de Cafayate 2016, Salta, $ 1.500.
La Finca Río Seco, de donde provienen las uvas para este syrah, está al sur de Cafayate, de suelos pedregosos, a 1.700 metros sobre el nivel del mar bajo el tremendo sol del norte argentino, condiciones que producen una uva briosa, indómita, a la que la dirección de Lucía Romero y la enología de Francisco Puga le dedican especial atención para que esas bravuras sean atemperadas. Esta expresión del syrah es interesante porque resaltan matices que no se van a encontrar en otras versiones. El guiso de cordero, la humita y las empanadas de matambre son una compañía ideal.
Diamandes de Uco, 2017, Mendoza, $ 1.310.
El enólogo Ramiro Balliro y la mirada de Michel Rolland proponen mostrar este varietal inclinado hacia lo exquisitamente aromático, con taninos sedosos, un leve amargor agradable típico del syrah que tranquiliza la fruta y ofrece un vino cálido y diáfano, con estructura aterciopelada, perfecto para una cena acompañando pastas o cordero.
La Espera Reserva, bodega Funckenhausen, 2019, Mendoza, $ 950.
Temperamental y con un toque de exotismo, porque lo opulento de la entrada viene acompañado por un toque de acidez agradable y sucrosidad que llena la boca de sabor. Color morado profundo, mezcla una concentración frutada con acidez vibrante de mucho refinamiento, empujado por el toque de malbec. Con pastas queda perfecto.
Pyros Valle de Pedernal, 2018, San Juan, $ 750.
Pyros, la bodega que Mynder Pon fundó en el Valle de Pedernal, San Juan, está a casi 1.500 metros. Por eso Paula González, la enóloga, sostiene que es un syrah de características muy diferentes. Sobresalen los frutos negros y la particularidad de que se mezclan notas de hierbas aromáticas como jarilla, tomillo y orégano.
Desquiciado syrah, 2020 Mendoza $ 720.
Este syrah aporta una aproximación moderna a esta cepa. Expresión juvenil, hálitos afrutados, afectuoso balance de acidez, impecable para sentarse a disfrutarlo con amigos, pide abrir una botella más, porque aun siendo expresivo, fluye con naturalidad.
Terrazas de los Andes syrah Reserva, 2020 Mendoza $ 570.
Jugoso, ameno y tranquilo en su paso, deja un largo sabor en boca. Vivaz, fragante, sensual, estas cualidades gravitan unidas a un precio más que convincente para tenerlo siempre a mano. Con ravioles o ñoquis con salsa hace un sostén apreciablemente gourmet.
Fond de Cave, Bodega Trapiche, Mendoza, 2019, $ 560.
Clasicazo vino nacional, un lujo en su gama de precio, de color seductor, aromas templados con hilos de vainilla y coco muy suaves, cárnico y con buena acidez, más bien seco como debe ser un syrah, con una suave astringencia que delata su predilección por las carnes asadas o el pollo grillado.
Don David, bodega El Esteco, 2019, Salta, $ 515.
Otro ejemplar de Salta para resaltar las cualidades y las diferencias del syrah de acuerdo con la región o con la enología que se le aplique. Es suave en su intensidad y sabroso en su simpleza, con un hálito a menta y pimienta que seduce.