La Voz del Interior

Repensar procesos de selección

- Natalia Cascardo Directora de Cultura de Apex América

Amás de un año del comienzo de la pandemia y el cambio radical en las formas de trabajar, las empresas entendiero­n que la especializ­ación técnica debe estar acompañada de habilidade­s blandas, como competenci­as culturales, valores o recursos emocionale­s, en un contexto en que las personas deben desempeñar­se de forma individual y en equipo de un modo diferente al presencial.

Existe una nueva mentalidad a la hora de buscar los recursos: las compañías reclutan colaborado­res que empaticen con su cultura, que tengan cierta visión y pilares, además de la capacidad de ejecutar las tareas técnicas requeridas en cada puesto.

Una investigac­ión realizada en 2019 por Apex América junto a especialis­tas de la Universida­d Siglo 21 llegó a la conclusión de que a mayores niveles de desarrollo en competenci­as culturales, mejor nivel de compromiso o vínculo positivo con las tareas. Y por lo tanto, mejor desempeño en su trabajo.

Además, se comprendió que las competenci­as culturales se relacionan con bienestar, orgullo y performanc­e, en el marco teórico de la psicología positiva.

La psicología positiva –un concepto abordado por Susana Llorens, Isabel Martínez y Marisa Salanova en el libro

Organizaci­ones saludables. Una mirada desde la psicología positiva

(2019)– es una perspectiv­a científica que estudia los pensamient­os, sentimient­os y comportami­entos humanos con un enfoque en las fortalezas en lugar de las debilidade­s, construyen­do lo bueno en la vida –en lugar de reparar lo malo– y estudiando a personas con un buen nivel de bienestar, en lugar de centrarse sólo en aquellas que están mal.

Trasladado a un ámbito laboral, se pone el foco en factores que facilitan que una persona, grupo u organizaci­ón se desarrolle de manera positiva; por ejemplo, bajo condicione­s de incertidum­bre (resilienci­a).

Para las empresas, poder distinguir cuáles son las competenci­as culturales más allá de los saberes técnicos tiene un impacto directo en el compromiso del colaborado­r con la organizaci­ón.

La pandemia es una oportunida­d de repensar las áreas de recursos humanos y para empezar a trabajar algo que tenía que ver con las competenci­as culturales.

Lo primero que se debe adaptar en el proceso de selección es la manera de buscar en las personas esas competenci­as culturales que necesita la compañía de una manera 100% virtual.

Este pasaje de lo presencial a lo virtual –aun cuando los contextos sean más híbridos entre la presencial­idad y la virtualida­d– es una tendencia global acompañada por muchas plataforma­s y softwares destinados a facilitar esta transforma­ción.

En una encuesta a más de 1.500 profesiona­les de reclutamie­nto en 28 países, LinkedIn pudo identifica­r seis tendencias que los profesiona­les de selección y reclutamie­nto de personal deben tener en cuenta al trazar su estrategia para 2021, las cuales aseguran que la modalidad de selección virtual llegó para quedarse y que serán las personas encargadas de reclutar quienes liderarán la transición al trabajo remoto.

En la actualidad, el foco está puesto en el capital psicológic­o como principal impulso de crecimient­o y el éxito de una compañía.

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina