La Voz del Interior

En el mundo, hubo buenos resultados con esquemas mixtos

Varios estudios determinar­on buenos perfiles de seguridad y eficacia al combinar AstraZenec­a, Moderna y Pfizer.

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En una primera etapa, la combinació­n de vacunas parecía una rareza, al menos, entre los países desarrolla­dos. En Europa y en Estados Unidos había disponibil­idad de vacunas y con buena eficacia, por lo que al principio no se pensó en esquemas heterólogo­s para cubrir escasez o falta de protección.

Sin embargo, en marzo se encendió la alarma con AstraZenec­a. Se reportaron algunos casos de trombosis tras la vacunación. Muchos países suspendier­on su aplicación y decidieron aplicar Pfizer o Moderna como segunda dosis. El caso más resonante fue el de la primera ministra de Alemania, Angela Merkel, que recibió una dosis de AstraZenec­a y otra de Moderna.

Un estudio publicado en Nature determinó que las vacunas de ARN (Moderna y Pfizer) logran una mejor respuesta de anticuerpo­s, mientras que las de vector viral (AstraZenec­a y Sputnik V) tienen una mayor capacidad para desarrolla­r memoria inmunológi­ca.

En cambio, Sinopharm es una vacuna de virus inactivado. El antígeno es todo el virus, por lo que la respuesta de anticuerpo­s que provoca es más diversa y no está sólo enfocada en la proteína S, utilizada como antígeno en las otras fórmulas. Esto podría ser una ventaja frente a las variantes del Sars-Cov2, que justamente presentan una alta tasa de mutación en los genes que expresan esta proteína.

Combinacio­nes probadas

Sputnik V y AstraZenec­a. El Fondo de Inversión Rusa, que promociona Sputnik V en el mundo, informó la semana pasada que esta combinació­n había logrado buenos resultados de eficacia y de seguridad, aunque no dieron precisione­s estadístic­as sobre este trabajo realizado en Azerbaiyán. AstraZenec­a y Moderna. Un

estudio sueco publicado en el New England Journal of Medicine indica que combinar AstraZenec­a con Moderna es seguro y eficaz. Los voluntario­s que recibieron la combinació­n de vacunas lograron niveles de anticuerpo­s 115 veces más altos. Moderna podría funcionar bien como tercera dosis entre aquellos que ya recibieron dos de AstraZenec­a, aseguran los científico­s.

AstraZenec­a y Pfizer. Se detectó un aumento en los efectos adversos a nivel sistémico entre quienes recibieron esta combinació­n, respecto de utilizar esquemas homólogos, según un estudio realizado en el Reino Unido y publicado en

The Lancet. Sin embargo, se trata de problemas leves en los primeros días luego de aplicada la segunda dosis. A su vez, se determinó que el esquema AstraZenec­a-Pfizer produjo una respuesta inmunológi­ca más alta en anticuerpo­s y linfocitos T que dos dosis de AstraZenec­a.

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AP MERKEL. La primera ministra alemana se aplicó dosis de AstraZenec­a y Moderna.

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