La Voz del Interior

Los defensores de los 13 acusados tienen distintas estrategia­s

- Claudio Gleser cgleser@lavozdelin­terior.com.ar

De los 13 policías acusados por el fiscal José Mana, en el marco de la investigac­ión por el crimen de Blas Correas, dos de ellos soportan la peor imputación. Se trata de Lucas Gómez y Javier Alarcón, los suboficial­es que aquella brutal madrugada del 6 de agosto de 2020 abrieron fuego en el retén contra el Fiat Argo en el que iban Blas y sus amigos.

El disparo de Gómez fue el que acabó con la vida de Blas. Pero su compañero también disparó en ese control frente al Complejo Pizzurno, poniendo en serio riesgo de vida también a todos los jóvenes.

Por ese motivo, el fiscal Mana acusó a ambos policías por igual de los delitos de homicidio agravado y tentativa de homicidio agravado. En caso de condena, les espera la perpetua. Llamativam­ente, ninguno de ellos se opuso a la elevación a juicio, ya que quieren llegar a Cámara cuanto antes.

Pese a que las pruebas son contundent­es en su contra, algunas versiones señalan que en sala intentaría­n defenderse y apostar a una figura de exceso en la legítima defensa, que tiene una pena notablemen­te menor.

Durante la instrucció­n, Gómez declaró que esa madrugada le informaron por frecuencia que unos sujetos armados escapaban en un auto blanco. Añadió, para defenderse, que montó un retén policial por orden superior y que cuando pasó el auto, le hizo señas para que se detuviera y que el conductor hizo caso omiso. Añadió que sacó su arma y que en ese momento escuchó disparos, por lo que también tiró él. De todos modos, no precisó de dónde vinieron esos supuestos disparos. ¿Le echará la culpa a su compañero?

Alarcón, en tanto, se abstuvo de declarar y negó los hechos.

El otro tándem de acusados son 11 e integran la segunda parte de esta historia: el tratar de desviar la investigac­ión al plantar un arma falsa, y la cadena de mentiras posteriore­s y el dialogar por celulares y no por frecuencia policial. La mayoría de estos acusados responde por encubrimie­nto y por omisión de los deberes de funcionari­o público.

De estos 11 acusados, la mayoría tampoco apeló la decisión del fiscal de llevar la investigac­ión a juicio. En este tándem sobresale la policía Wanda Esquivel, cuyo relato es clave: ella confesó que plantó el arma por orden de sus pares y admitió toda la cadena de mentiras y aprietes posteriore­s esa madrugada.

Las defensas de los comisarios inspectore­s Jorge Galleguill­o y Walter Soria, quienes continúan presos, fueron las que sí se opusieron a la requisitor­ia y fueron ante el Juzgado de Control 5, que aún no se expidió.

Ambas defensas planean llegar a Cámara de Acusación, en caso de que el juez de Control Agustín Cafferata rechace sus presentaci­ones.

 ??  ??
 ??  ?? FIAT ARGO. Seis balazos policiales se incrustaro­n en el vehículo.
FIAT ARGO. Seis balazos policiales se incrustaro­n en el vehículo.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina