Bessonart. Imputan a policías por filtrar fotos
Se trata de los últimos rastrillajes realizados en un campo de Tío Pujio en torno al caso de la mujer de Villa María cuyo paradero es un enigma desde hace casi 16 años.
Tres policías de la división Protección de las Personas fueron imputados por la fiscal que investiga la desaparición de Mariela Bessonart. Se trata de tres oficiales que trabajan en la propia Jefatura de la ciudad de Córdoba y que habían viajado a Villa María y a Tío Pujo de manera especial para abocarse a este caso, informó el Ministerio Público Fiscal.
Los policías, entre los que se encuentra un alto jefe, según trascendió, fueron imputados por el delito de “desobediencia a la autoridad”. De acuerdo con lo informado, no dieron “estricto cumplimiento a directivas impartidas por la fiscal a cargo de la causa”.
Según trascendió, la filtración pública de imágenes correspondientes a alguno de los procedimientos realizados en los últimos días sería el motivo de la imputación. El caso puede traer derivaciones, ya que las fotos cuestionadas fueron divulgadas de manera oficial por la Policía a la prensa.
La fiscal Juliana Companys mantiene una estricta reserva en torno al avance del caso en las últimas semanas. E
La titular de la Fiscalía de Segundo Turno de Villa María retomó el mes pasado la iniciativa en la búsqueda de Mariela Bessonart, desaparecida en Villa María en 2005.
Los últimos dos procedimientos que se conocieron fueron un allanamiento y excavaciones en un campo cercano a Tío Pujio y en una vivienda en las periferias de esa localidad.
En ambos casos no se dio con restos óseos, aunque en el primero de ellos, según se señaló, hallaron papeles enterrados que estarían de 2005, el mismo año en que desapareció la mujer.
Esto fue en un campo propiedad de Rodolfo Delpino, exesposo de Bessonart, y único imputado.
Las pesquisas comenzaron los primeros días de agosto con participación de la Policía Federal, de la Policía Judicial, de la Gendarmería Nacional, de personal del Ministerio de Seguridad de la Nación, de bomberos voluntarios y de personal de la fiscalía. Como parte de la búsqueda, se hicieron rastreos con la utilización de georradares y de perros especializados, hasta que se llegó al levantamiento del piso de un galpón situado junto a la casa de campo.
También se rastrilló y se excavó en viejas taperas.
La actual fiscal “heredó” la causa del anterior titular de esta fiscalía, Gustavo Atienza, quien elevó a juicio la parte del expediente que tiene como acusado a Delpino. Pero quedó abierta la parte de la investigación centrada en la búsqueda, con vida o no, de Bessonart.