La falta de tolerancia
Las situaciones conflictivas que debemos vivir a diario nos llevan a poner en práctica la tolerancia, que es la capacidad de aceptar y escuchar, ejerciendo respeto y consideración hacia los demás.
Se trata de admitir en el otro una manera de ser y de obrar distinta a la de uno, aceptando puntos de vistas diferentes que en muchos casos no coinciden con los nuestros.
Por lo tanto, la tolerancia es un valor muy necesario en estos días, que nos permite desarrollar relaciones interpersonales para poder asegurarnos una convivencia en paz. Es una virtud de enorme importancia, que al llevarla a la práctica nos aleja de los enfrentamientos y de la violencia que están tan presentes hoy en día en nuestra sociedad.
Lamentablemente en estos días, en nuestro país, la intolerancia está produciendo innumerables hechos de violencia y enfrentamientos entre compatriotas.
El no aceptar opiniones o ideas de los demás que no coinciden con las propias, y el hecho de no ceder en la defensa de intereses personales es lo que lamentablemente caracteriza a un buen número de hombres y mujeres en nuestra sociedad.
La intolerancia trae como resultado la violencia. La consecuencia es la discriminación dirigida hacia grupos o personas por el hecho de que estos piensen o actúen de una manera diferente. La actitud violenta es un signo de la intolerancia. Por el contrario, la tolerancia es un elemento fundamental y necesario en toda relación, para que esta permanezca y sea duradera.
El apóstol Pablo les dice, escribiéndoles a los efesios: “Les ruego que vivan de una manera digna, siempre humildes y amables, pacientes, tolerantes unos con otros en amor. Esfuércense por mantener la unidad del espíritu mediante el vínculo de la paz” (Efesios 4: v. 1 al 3).
El amor es un elemento imprescindible para el ejercicio de la tolerancia. Sé que no es fácil llevarla a la práctica pero, como dice el apóstol, nos ayuda a mantener la unidad para disfrutar de la paz que tanto necesitamos.
Quiera dios que la tolerancia sea una realidad entre los argentinos. Que por medio de ella dejemos de lado los enfrentamientos para poder vivir en una sociedad en paz. Dios, que conoce al ser humano íntimamente como nadie lo conoce, puede ayudarnos a relacionarnos a través de su obrar en nosotros. Que así sea. Dios te bendiga.