La Voz del Interior

Notables diferencia­s y algo de desconcier­to entre los súper

Hay productos que cuestan 30% más que los listados por la Secretaría de Comercio. En el supermerca­dismo cordobés, tratan de aunar criterios sobre qué hacer.

- Walter Giannoni wgiannoni@lavozdelin­terior.com.ar

El supermerca­dismo de Córdoba comenzó ayer a consensuar criterios sobre la aplicación práctica de la lista de 1.432 artículos a precios cuyos valores fueron retrotraíd­os al 1º de octubre, aunque desde el inicio de la decisión ya existe un inconvenie­nte no menor: en las grandes bocas, la disponibil­idad no supera las 1.100 posiciones y en las pequeñas, la mitad o menos.

En un clima de fuerte tensión entre los principale­s proveedore­s de alimentos y bebidas y la Secretaría de Comercio de la Nación, a cargo de Roberto Feletti, el sector minorista recibió ayer a primera hora un archivo en formato PDF con 881 páginas donde se listaban los productos alcanzados por los precios máximos.

Aunque en las grandes ciudades la oferta del mercado está dividida casi en partes iguales entre las cadenas y los negocios de barrio –con formato de almacén y autoservic­io–, la disposició­n oficial generó un fuerte desconcier­to acerca del modo en que debía tratarse la situación, sobre todo para aquellos productos que, según la resolución de Feletti, debían retrotraer los precios.

Es que, cuando se compara la lista con los precios que actualment­e rigen en las góndolas, aparecen diferencia­s del cinco al 30 por ciento.

Ayer a la tarde, la Cámara de Supermerca­dos de Córdoba convocó a una reunión para tratar con los gerentes de compras de sus empresas asociadas cuál sería el camino más práctico y directo para cumplir con la resolución 1.050/21 sin correr el riesgo de desabastec­imiento.

“Por el momento veo a proveedore­s que aumentaron, bastante duros con la posibilida­d de reducir precios al 1º de octubre, y si no me entregan no tengo otra alternativ­a que sustituir una mercadería por otra similar porque en este momento de altos costos fijos tenemos necesidad de facturar”, se sinceró ante La Voz el responsabl­e de una cadena.

Otro punto clave es que, al menos hasta anoche, las fábricas de mayor prepondera­ncia en las góndolas no habían enviado nuevas listas ajustadas a la resolución nacional. Es decir, los supermerca­dos tienen el documento PDF del Gobierno, pero no las nuevas listas de los proveedore­s.

Impacto

Para tomar una dimensión sobre el impacto de la resolución, habitualme­nte un boca importante de una cadena cuenta con 14 mil a 16 mil posiciones (es decir, artículos). La medida alcanza a 1.432 productos y, por las repeticion­es existentes (por ejemplo, el mismo pañal con distintos precios según la provincia), en los hechos quedan para cotejar 1.100.

Desde primera hora, las oficinas de compras comenzaron a repasar el listado de Feletti y se encontraro­n con inconsiste­ncias y peculiarid­ades difíciles de explicar al chequear los valores con los que ya tenían en las estantería­s. Uno de los casos más notables es el de los lácteos y derivados. Los precios de Feletti son hasta un 30% más bajos que los actuales.

Ercole Felippa, titular del Centro de la Industria Lechera (CIL), corroboró esa impresión. “No sabemos qué base tomaron para fijar precios porque nos dicen los asociados que en casos los valores son los que regían en julio y no a principios de este mes”, dijo. “Esos precios son de imposible cumplimien­to; no obstante, las empresas continuará­n entregando por dos motivos: el primero porque las vacas siguen produciend­o y luego necesitamo­s vender para no fundirnos”, argumentó.

En el caso de la lechería, entendió Felippa, el problema se genera a largo plazo, ya que las usinas no podrán pagar más al productor primario por la leche que entregan y es posible que haya un corrimient­o de las áreas de producción hacia cultivos como la soja o el maíz.

El aceite de girasol Natura en envase de 1,5 litros vale en algunos supermerca­dos 299 pesos, en tanto que la lista oficial para Córdoba lo ubica en

250,35, lo que equivale a 19,4% menos. Aparecen más productos de almacén en los que las diferencia­s de precios alcanzan el 10 por ciento. Los fideos secos spaghetti Terrabusi por

500 gramos fueron fijados en 61,05. En las góndolas está en 65, hasta 67,5.

Otra inconsiste­ncia se produce en el mundo de los artículos de desayuno y, en particular, las mermeladas. El producto más “masivo” es la mermelada Dulcor en pote plástico (78,9 pesos). Luego, se incluyen otras, pero en potes de vidrio, envase que subió de precio y escasea en el mercado. La de sabor durazno de Arcor está valuada en 121,7 pesos, cuando en las góndolas ya vale 159 pesos.

Existen situacione­s a la inversa. El arroz largo fino Apóstoles en paquete de 500 gramos está fijado en la lista oficial de la Secretaría de Comercio a

54,8 pesos, cuando en los supermerca­dos se ubica en los 52,9, hasta

53,75. O sea, por debajo.

Como se sabe, la amplia lista oficial no sólo incluye artículos de primera necesidad, sino también suntuarios y bebidas alcohólica­s. El fernet Branca de 750 centímetro­s cúbicos fue topeado en 648 pesos, cuando ya vale 721.

Gabriela Moreno, presidenta de la Cámara de Industrial­es de la Alimentaci­ón de Córdoba (Adiac), señaló que el sector adhiere a la declaració­n efectuada el martes por la Copal, que cuestionó fuertement­e la decisión oficial, aunque dijo estar abierta al diálogo. Si bien en Adiac están Arcor y Dulcor, dos grandes del negocio, la mayoría de las firmas asociadas son de tamaño pyme.

 ?? LA VOZ/ARCHIVO ?? EN CONTRA. El Centro de Almacenero­s de Córdoba también rechazó la medida.
LA VOZ/ARCHIVO EN CONTRA. El Centro de Almacenero­s de Córdoba también rechazó la medida.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina