Después de dos años, la Oktoberfest vuelve recargada
La 59ª Fiesta Nacional de la Cerveza empieza hoy y tendrá su pico de convocatoria en el próximo “finde” extralargo. Se espera una multitud. Lo que hay que saber.
Lo que parecía imposible que alguna vez sucediera lo logró la pandemia: se cancelaron dos ediciones, en casi 60 años de trayectoria, de la tradicional Fiesta Nacional de la Cerveza de Villa General Belgrano. Pero el evento más convocante de Córdoba fuera del verano regresa, desde este viernes 30 al lunes 10 de octubre,
Un engranaje importante en la economía del valle de Calamuchita vuelve con expectativas aumentadas.
Desde hace días, la dinámica cotidiana en esta localidad sintoniza con la Oktoberfest, y toda situación que no gire en su torno se posterga para el después.
Para la mayoría de sus 13 mil habitantes, la fiesta tiene alguna implicancia económica, laboral o sentimental. Modifica la rutina diaria de la población. Desde salas-cuna que funcionan hasta esos “findes” para asistir con el cuidado de niños a las familias que trabajan, comercios que refuerzan varias veces su stock, cerveceros locales que producen miles de litros de la bebida estrella, personas que por unos días suman un trabajo extra o vecinos que preparan sus trajes típicos para lucir en los desfiles que verán los turistas.
El evento tiene un alto impacto en las plazas de alojamiento de todo el valle de Calamuchita. Las camas se agotan y producen derivaciones de visitantes hacia otras zonas en el “finde” más fuerte. Junta más turistas que los mejores días de cada verano. El fenómeno económico no es local sino regional, desde hace años.
Esta edición
La fiesta se desarrollará durante dos fines de semana: arranca este viernes 30 de septiembre al domingo 2 y se reanuda el viernes 7 hasta el lunes 10. El martes 11, ya sin turistas, los vecinos seguirán la celebración “puertas adentro” en el mismo predio, para conmemorar el cumpleaños 90 de Villa General Belgrano.
El intendente Oscar Santarelli subrayó que el municipio lleva invertidos 80 millones de pesos en distintos aspectos. Los ingresos que obtiene es a través de la licitación de los puestos en el predio, la venta de entradas y algunos auspicios. El Bosque de los Pioneros, donde se desarrolla, lleva 20 millones invertidos, apuntó Santarelli. Ya se contrataron 330 personas para seguridad, aseo y tránsito.
Entre otras novedades, el predio incorporó más de 1.500 butacas que reemplazan a las sillas plásticas para disfrutar de los espectáculos, mejoró sus espacios verdes y la estética de los más de 40 stands de cervezas artesanales e industriales y de gastronomía.
El evento propone además de la degustación de comidas y bebidas, numerosos espectáculos continuados en un escenario principal y, en algunos momentos, en un segundo escenario alternativo. A la grilla habitual de músicos y ballets de distintas tradiciones europeas se agregan este año recitales de artistas populares de renombre, en seis de los siete días. Estarán Soledad Pastorutti, Miranda, Bersuit, Vilma Palma, Los Pericos y Planeador V (en tributo a Soda Stéreo).
Hasta este jueves, se llevaban vendidas unas 20 mil entradas de forma anticipada. Más de 12 mil se concentran para la noche “fuerte” del sábado 8. Los precios de los tickets, de acuerdo a la jornada, cuestan de 1.600 a 5.500 pesos. El predio abrirá cada día al mediodía.
También afuera
El desfile, el momento más colorido por las calles del centro de la localidad, tendrá más de 500 participantes, con trajes típicos y carrozas. Los que representen a los italianos, solamente, serán más de cien, que sumarán, además de músicos en un carro, la réplica de una góndola realizada sobre un chasis de un automóvil, de diez metros de largo. Cada colectividad se preparó de forma especial para lucirse debajo de cientos de banderas de todos los países que ornamentan la zona céntrica y con una decena de pantallas gigantes replicando cada paso.
Para ese espectáculo, fuera del predio, no se paga entrada.
También hay tres pantallas gigantes instaladas sobre ruta 5, frente a cada ingreso, promocionando la fiesta. Porque el evento se vive adentro y afuera del predio. Si en los últimas ediciones se vendieron unas 50 mil entradas al predio, se estima que unas 150 mil personas pasaron por la villa serrana.
Vecinos, protagonistas
Además de cerveceros artesanales que producen miles de litros en estos días, otros rubros dinamizan su trabajo. Como la modista Rosana Geisbulher Guler, que desde julio está trabajando en la confección de trajes típicos: dice que su trabajo se incrementó respecto a la fiesta anterior, y que la gente le pide mayor calidad en telas y detalles.
Roberto Friedl y su padre tienen un emprendimiento de chucrut, la guarnición preparada a través de la fermentación de repollo, que acompaña las salchichas y otras comidas típicas alemanas. Este año producirán unos 4.500 kilogramos para distribuir en stands gastronómicos en el predio, restaurantes y venta de frascos a particulares. Duplicaron la cantidad respecto a la fiesta anterior.
En Villa General Belgrano, la reserva anticipada de alojamiento para el primer fin de semana de fiesta ya era del 75% hasta ayer (considerando dos días de ocupación) y llega al 92% (con tres días de estadía) para el segundo. Pero nadie duda que llegará al 100% en el “finde” extralargo, en varias localidades.
En la zona, en tanto, las reservas para el primer “finde” no tienen demasiado impacto hasta ahora, pero sí para el segundo. Casi todos creen que, como en otras ediciones, quienes arriben sin reserva deberán ser derivados fuera del valle. Los Reartes, por ejemplo, ya tiene un 90% de reserva para esos días, Santa Rosa un 93% y Villa Ciudad Parque un 75%.