Belgrano. Los refuerzos, con rendimientos dispares
Cinco jugadores llegaron antes del inicio de la temporada; y el chileno Ibacache, después. En julio se abre el libro y habrá novedades.
El 25 de septiembre de 2022 en el estadio de San Nicolás, Belgrano le ganó 3-2 a Brown de Adrogué y logró el ascenso a la Liga Profesional para jugarla desde enero de 2023.
Los dirigentes tuvieron desde el minuto final de ese encuentro la certeza absoluta que la temporada siguiente sería en Primera. Antes, un par de fechas, el ascenso era cuestión de tiempo, con lo cual hubo casi cinco meses de tiempo para preparar la plantilla para lo que se le venía.
Reunidos con Guillermo Farré, los directivos consiguieron que el entrenador, que había asumido a fines de mayo de 2021, se quedara en el club hasta diciembre de 2023 y en la primera charla el DT pidió “sostener la base” para con ella buscar hacer lo mejor posible en Primera y reforzarse en puestos muy puntuales.
La base se quedó y llegaron cinco jugadores para ser “las caras nuevas” de una plantilla integrada por jugadores con recorrido en el ascenso y un paso en Primera, más un grupo de productos genuinos de las juveniles. Después se sumó un sexto jugador, cuando la lesión de Oliver abrió una chance de incorporar.
Los “nuevos”
Ninguno de los “nuevos” marcó una diferencia a la hora de jugar que lo haga indiscutido en el equipo y prácticamente todos vienen alternando en sus puestos. A la vista está claro que el plantel es “corto” para las exigencias de la temporada y aunque los 28 puntos hablen de un gran presente, el mismo se ha conseguido en gran parte con la base del año pasado y no con lo reforzado.
Tanto es así, que en el 11 inicial que jugó el clásico con Talleres en el Gigante de Alberdi la fecha pasada, solamente el chileno Ibacache era
“nuevo”, los 10 restantes fueron jugadores que estaban en el ascenso. Y en el complemento ingresaron otros dos “nuevos”: Diarte y Jara.
Lucas Diarte. Marcador lateral por la izquierda de 29 años que llegó desde San Martín de Tucumán. Vino para ser el “3” del equipo y comenzó desde la pretemporada como titular, pero en la fecha 6 perdió su puesto con Francisco Oliver. Sin embargo el ex-Tigre se lesionó gravemente de la rodilla (rotura de ligamento cruzado) y volvió a jugar hasta la llegada de Alex Ibacache. En total acumula ocho partidos desde el inicio, siete ingresando y uno de suplente, suma 768 minutos en campo y le marcó un golazo a Huracán en Alberdi.
Erik Godoy. El marcador central llegó desde la MLS con 29 años. Con un paso anterior en el Pirata en 2017/18, el defensor conocía la idiosincrasia del club y se sumó antes del inicio del campeonato. Jugó 13 partidos de titular en uno fue suplente y se perdió, hasta ahora, tres partidos por lesión. No marcó goles y tiene 1.170 minutos en cancha.
Matías García. Es el refuerzo que vino para hacer la diferencia. Pretendido por otros clubes, el Pirata hizo un esfuerzo económico y sumo al “distinto” de 31 años, pero “el Caco” no tuvo la buena racha física que se esperaba y aunque cada vez que jugó siempre lo hizo en un buen nivel, lleva en 17 partidos tres lesiones musculares: en la fecha 1 ante Racing, en la previa a Atlético de Tucumán y antes del clásico con Talleres. Suma 734 minutos en campo y le hizo un gol olímpico a Unión en Santa Fe. Fue 9 veces titular y una ingresó desde el banco, los otros siete partidos se los perdió por lesión.
Franco Jara. Un jugador de reconocida trayectoria con 34 años de edad. Un delantero para dar un salto de jerarquía, pero que por ahora aportó poquito al equipo. Estuvo en 16 convocatorias (se perdió el juego con Newell’s por lesión) y fue titular en siete partidos, en cuatro ingresó y en cinco se quedó en la banca. Completa desde su llegada 519 minutos y no ha conseguido goles.
Andrés Amaya. El colombiano fue una apuesta de los dirigentes por un jugador de 21 años. Es extremo o volante. Apenas estuvo en cancha en 26 minutos y en un par de partidos en reserva donde no marcó diferencias. Por ahora no muestra nada que haga pensar que seguirá en la “B” después de la temporada. Farré prácticamente ni lo tiene en cuenta y suma 11 convocatorias y sólo en un partido ingresó (con Sarmiento). Fue al banco varias veces, incluso en el clásico.
Alex Ibacache. Es el sexto refuerzo y llegó después de la fecha 7 en lugar de Francisco Oliver, quien se rompió los ligamentos de la rodilla izquierda. El chileno firmó por tres temporadas a cambio de una importante suma de dinero. Desde que arribó se ganó la titularidad por sobre Diarte. Debutó ante Sarmiento en el Kempes y jugó siete encuentros desde el inicio y se perdió dos por lesión. Acumula 474 minutos y ningún gol, solamente completó uno de los siete partidos (ante Boca), en los otros fue reemplazado.
Corregir a futuro
De acuerdo a lo que establece el artículo 18.1 del reglamento de la presente temporada de la Liga Profesional de Fútbol, así será el mercado: “Al término de la disputa del Torneo de la LPF, se reabrirá el Registro de Inscripciones, Transferencias y Contratos de Jugadores, a los fines que los clubes participantes puedan producir las incorporaciones de cualquier carácter y sin límite de cantidad”.
Por ello es que los dirigentes se encuentran ya trabajando en una nómina de no menos de cinco futbolistas para sumar a la plantilla y darle mayores “opciones” al entrenador, quien no tuvo en los refuerzos a jugadores que hicieran la diferencia.
También será el tiempo de algunos desprendimientos, ya que al menos habrá cuatro o cinco bajas en el equipo. Algo que se analiza por estos días y cuya lista de nombres todavía no está definida.