Con todas las luces
Los tratamientos con luz de LED constituyen uno de los últimos avances en el campo de la estética. La combinación de esta tecnología con los principios activos de productos cosméticos, es muy eficaz como anti age para el rostro, cuerpo y hasta en el blanq
Los pueblos de la antigüedad fueron los primeros en descubrir los efectos beneficiosos de la luz, y con los recursos que tuvieron a su alcance se encargaron de sacarle el máximo provecho a sus propiedades curativas. Por eso, cuando al día de hoy se buscan soluciones innovadoras a los conocidos problemas del paso del tiempo, no debería asombrarnos que todavía siga siendo la energía lumínica un elemento central en los tratamientos de belleza. En este caso, es la conocida tecnología LED (diodos emisores de la luz), un descubrimiento, producto de un estudio realizado por la NASA en la década de los 90, la que desembarca en el universo de la estética.
Si bien estas luces pueden aplicarse en cualquier superficie cutánea, por su efecto tensor, la cara es uno de los focos principales a los que apunta esta técnica. “El activo facial LED trabaja en tres direc- ciones: antiarrugas, hidratación y flacciidez. Está indicado para cualquier edad, d, ya que actúa en profundidad mejorando o la elasticidad, firmeza y luminosidad de e la piel”, explica la Dra. Laura Mijelshon Directora del Centro Piel y Estética. Dependerá de la edad y el tipo de piel de cada paciente, qué combinación de luces s y productos serán los convenientes para a mejorar el estado de la zona a tratar.
La luz blanca en acción
Para combatir las marcas más indeseadas y comunes, como las manchas, las arrugas, el acné y las cicatrices los tratamientos con esta luz fría se posi- cionan como una alternativa más que viable. “La tecnología LED produce un efecto en la unión entre la dermis y laa epidermis que inicia un proceso natural de cicatrización desde adentro hacia afuera. El proceso aumenta el flujo
de sangre a la zona tratada, mejora el metabolismo de la piel e induce la remodelación del colágeno promoviendo
una piel más tersa y saludable”, explica la Dra. Mónica Milito, Directora de la Clínica Dra. Milito.
Además, como si fuera poco, los efectos de estas luces aplicadas sobre la piel inhiben la reproducción de la bacteria causante del acné, minimizan el tamaño de los poros dilatados, el de las glándulas sebáceas, y disminuyen al mismo tiempo la oleosidad de la piel. También los tratamientos de estas características son recomendados por disminuir la hinchazón que producen algunas intervenciones estéticas, y por tener efectos relajantes.
En todos los casos, el dispositivo de LED emite una luz fría, con una longitud de onda variable, que penetra la piel en distintas profundidades. El tratamiento puede complementarse con productos cosméticos en el caso de que el problema lo requiera.
Durante la sesión en gabinete, el paciente debe colocarse unos anteojos para proteger sus ojos de la luz. Después de la misma, los resultados son inmediatos, y los efectos secundarios nulos. La persona que se ha sometido a una sesión de esta naturaleza puede retomar sus actividades normales sin inconvenientes. Para que los logros obtenidos por la acción del LED sobre la piel se potencien, los especialistas recomiendan aplicar una crema hidratante. En relación a los tratamientos complementarios, las terapias con LED funcionan perfectamente bien en combinación con tecnologías de rejuvenecimiento y aclaramiento facial como la microdermoabrasión, la radiofrecuencia y medicamentos dermatológicos, entre otros.
Para todas
Una de las principales ventajas que hacen de los tratamientos de estas características una alternativa más que seductora frente a otro tipo de técnicas, es que se trata de un procedimiento indoloro, no abrasivo y que no tiene ningún tipo de efecto secundario ni térmico, por lo que se puede aplicar sobre cualquier tipo de piel, aún en las más sensibles.
Las únicas mujeres que deben abstenerse de exponerse a esta técnica son las embarazadas.
Tratamientos
Las luces de LED pueden ser las protagonistas de los procedimientos, o bien complementar los mismos por sus propiedades restauradoras del estado general de la piel.
Cryolipolisis LED: es una técnica de última tecnología para el tratamiento de la celulitis y la flacidez. Sus efectos tienden a activar las fibras de colágeno, devolviéndole a la piel parta de su elasticidad perdida.
Rejuvenecimiento facial no invasi
vo con luz LED: este tratamiento estimula la regeneración celular y promueve la cicatrización de heridas. Además de su alto poder hidratante, cierra poros dilatados y estimula la síntesis de colágeno. Por su parte, la luz de LED interactúa con las células estimulando la producción de colágeno y elastina. Está indicado para tratar, arrugas, surcos y flaccidez.
Hidrafacial con LED: en el caso de este tratamiento, la luz funciona para completar una técnica de otras características: un peeling al que se le suma la hidratación, a partir de un procedimiento de hidroder moabrasión que combina limpieza, exfoliación y extracción. La sesión final de luces está orientada a iluminar la piel.