Pieles encendidas
cial cuidado con los rayos UV, evitando la exposición a los mismos siempre que sea posible, y utilizando bloqueador solar diario con un FPS mínimo de 30.
De acuerdo con los síntomas, se divide en cuatro subtipos, que pueden aparecer de manera combinada en un mismo paciente.
Eritemato-telangiectática: se trata de una coloración roja permanente. También es común que presente pequeños vasos sanguíneos visibles, junto con sensación de quemazón y picazón.
Papulopustular: con frecuencia se confunde con el acné, ya que además de coloración rojiza permanente se presenta con granos enrojecidos.
Fimatosa: está asociado con el engrosamiento de la nariz. Los síntomas además incluyen nódulos de superficie irregular.
Ocular: es el subtipo que afecta los ojos y también a los párpados, que se muestran enrojecidos, secos e irritados.
Aunque las pieles con rosácea son extremadamente sensibles, existen productos específicos que aplicados con regularidad pueden contribuir a la descongestión de la zona. En este punto es importante contar con el asesoramiento previo de un dermatólogo que pueda indicar cuáles pueden utilizarse en cada caso.
En términos generales, están recomendados aquellos de bajo contenido graso, a base de manzanilla, azuleno, hamamelis, malva, caléndula, salvado de trigo, entre otros. Por su parte, los cosméticos con alcohol, aceites, fragancias o conservantes excesivos están contraindicados. Del mismo modo, se deben buscar alternativas al uso de cre-