De todo menos hijos
Bautizadas con la sigla Dink, las parejas jóvenes que deciden no tener hijos para no relegar su futuro profesional y económico son cada vez más. El Dr. José Abadi analiza esta modalidad
Mientras, por un lado, el avance en las técnicas de fertilización y el acceso masivo a ellas más la pelea por adopciones legales, plenas y accesibles aun para matrimonios homosexuales muestra que sigue vigente la aspiración de las parejas a formar familias con hijos, sin prisa pero sin pausa avanzan los Dink: Double Income No Kids, que significa doble salario sin hijos.
Estas nuevas familias de cualquier condición sexual se asientan sobre una posición ideológica y no sobre la imposibilidad de procrear, se trata de una elección y proyecto de vida. Según una investigación publicada por la Agencia Ignis, en una franja de jóvenes de entre 25 y 39 años que elige formar una familia, el 75% tiene hijos de entre 3 y 8 años, pero el 9% se definió como Dink. Son un total de 500.000 personas aproximadamente en el país y el 47% reside en la Ciudad de Buenos Aires y el Gran Buenos Aires
Estas parejas priorizan su crecimiento profesional por sobre el proyecto de convertirse en padres, trabajan los dos y no tienen hijos. "El punto interesante y novedoso sobre los Dink es que superan el viejo dilema que abre que uno de los miembros de la pareja no quiera tener hijos y el otro acepte resignado, se trata de una situación de acuerdo. Esta es una época en la cual el concep-
to tradicional de “familia feliz” ya no es ni tan universal, ni tan relativo, continúa en crisis y a la vez se redefine constantemente", explica el Dr. José Abadi, médico psicoanalista y dramaturgo
El crecimiento de este fenómeno sociocultural podría interpretar
se bajo tres variables: “La primera, son las causas económicas, el no tener los medios suficientes para pensar en los hijos y todos los gastos a su alrededor o, simplemente, no estar dispuesto a destinar el dinero a esos gastos. La segunda, y seguramente la más profunda, tiene que ver con la desvinculación de lo que significa ser padres y estar en pareja. Antes era una continuidad fisiológica, pero ahora ya no es un continuum. La tercera es la competencia laboral, la idea de que la maternidad-paternidad vaya a quitarles tiempo y eficacia no les resulta aceptable”, define Abadi. Otro punto importante en esta nueva tendencia es que cambia las reglas del poder; ninguno de sus miembros define como realización de la relación o la felicidad familiar a la llegada de los hijos y, por lo tanto, ninguno debe resignar nada. “Combinan el mito de la eficacia, la ansiedad laboral y el narcisismo. Pero lo que esta tendencia viene a corroborar es el nuevo dibujo de la relación de poder en la pareja en la que la mujer renunciaba a un determinado rol social y hoy en día pide simetría, la mujer dice: 'Quiero alcanzar tanto como vos. Yo no me voy a quedar en casa cuidando a los chicos", explica
Abadi.
Radiografía de la tendencia
Los Dink se caracterizan por ser poco apegados a la tradición, no prestar relevancia al casamiento, ser sofisticados y amar la tecnología. Pertenecen a segmentos socioeconómicos medio-altos y el 59% de ellos tiene estudios universitarios o terciarios. Por otro lado, el 28% lee diarios y libros en inglés, ya que éste es su segundo idioma. El 45% lo aprendió en el colegio o universidad, mientras que el 18% lo hizo en institutos. Además, dedican su tiempo libre a invertir sus ingresos en ellos mismos, una cualidad hedonista característica