Hacé kanikama en casa
La elaboración del surimi es una técnica milenaria que nace en Japón, bajo el nombre de kamaboko, que significa modo de conservación de pescado. Por eso, acá lo conocemos como kanikama. Los nipones descubrieron que los lomos de pescado, una vez lavados, mezclados con sal y cocinados al vapor, se conservaban durante más tiempo.
Para hacer surimi en casa, el primer paso consiste en utilizar las partes más nobles del pescado, es decir, los lomos y muy frescos. Tras picar el pescado sin espinas, se le añade agua para limpiar sus impurezas y eliminar la grasa, dejando solo la pura proteína del pescado, es decir, el surimi. A esta proteína se le añade pimentón, que otorga ese color naranja tan característico de las barritas.
También se puede probar con esta receta: lavar 400 g de pescado a fondo bajo agua corriente para quitarle la grasa. Procesar hasta obtener un puré y escurrir bien. Agregarle a esa pasta, 4 cucharaditas de fécula de maíz, 3 cucharaditas de mirin ( vino de arroz dulce o jerez), 1/ 2 cucharadita sal y 1 clara de huevo y mezclar todo bien. Separar la mitad de la pasta y poner un poco del colorante elegido, mezclar muy bien. Reservar. Poner sobre el papel film la pasta coloreada lo mejor repartida y plana posible, encima, disponer de la pasta sin colorear. Dar a la pasta de pescado forma de cilindro ayudándose con papel film transparente. Poner sobre papel de cocción y cocinar al vapor durante 40 minutos.