ALUMINIO
Cómo hacerlo: limpiá los marcos de puertas y ventanas siempre desde arriba hacia abajo, esto va a hacer tu trabajo más simple y productivo.
Marcos por fuera: 1- Lavá los marcos de puertas y ventanas con una manguera para sacar la mayoría de la suciedad superficial, lo que facilita mucho el trabajo. 2- Limpiá los marcos con detergente y agua o con un limpiador de aluminio (leé las instrucciones del envase y probá en una superficie reducida del marco antes de aplicarlo en toda la zona). 3- Enjuagá con agua limpia para quitar la suciedad y los restos de productos de limpieza.
Marcos por dentro: 1- Pasá un trapo húmedo por los marcos. 2- Usá el mismo limpiador de aluminio que usaste para los marcos exteriores. 3- Secá el agua que quede con un trapo seco para dar brillo al aluminio.
Brillo: una vez que hayas limpiado los marcos de aluminio, dale brillo con una virulana y un poco de agua. Tené en cuenta que pulir todo el metal te va a llevar un buen rato. Si el metal estuvo expuesto a los efectos adversos del clima durante mucho tiempo, comenzará a anodizarse. ¿Eso qué quiere decir?: que se junta óxido en la superficie, opaca el metal y lo hace más difícil de pulir. Si esto ocurre, hay que recurrir a productos específicos o a un especialista.