Claves saludables
Lograr una alimentación saludable es uno de los grandes objetivos en las sociedades actuales, encontrando una marcada tendencia hacia un plan de alimentación que abandona o se despoja de antiguos conceptos como “dieta” o “régimen”. La mayoría de los países, incluida la Argentina, luchan contra cifras crecientes de obesidad, sobrepeso, diabetes, hipertensión y enfermedades cardiovasculares en todas las etapas de la vida. Dentro de un marco de prevención y tratamiento de sobrepeso y obesidad, enfermedades que han pasado a ser una epidemia mundial, expertos y entidades nacionales –entre ellos la Asociación Argentina de Dietistas y Nutricionistas (AADYND), la Sociedad Argentina de Nutrición (SAN), y la Federación Argentina de Graduados en Nutrición (FAGRAN)–, han puesto énfasis en fomentar una alimentación saludable y, dentro de la misma, aquellos alimentos que poseen alta densidad nutricional. Es decir, aprender a elegir alimentos ricos en nutrientes (vitaminas, minerales, proteínas) y preferentemente bajos en calorías. De este modo se sale del antiguo paradigma que llevaba a seleccionar los alimentos solamente en función a las calorías que aportaban para redireccionarnos hacia un nuevo concepto que contempla al alimento en su totalidad, evaluando todos los nutrientes que lo componen, y así poder clasificarlos en saludables o menos saludables. Un plato de arroz común tiene las mismas calorías que un plato de arroz integral, pero nutricionalmente no aportan lo mismo, ya que éste último tiene mayor contenido de fibras, vitaminas y minerales. A través de los sistemas de Perfiles Nutricionales (NP, Nutrient Profile), se pueden identificar los nutrientes a promover (vitaminas, minerales, proteínas, fibra) y los nutrientes a limitar (grasas, azúcares, sal) en un alimento. A cada alimento le asigna un puntaje tomando en cuenta nutrientes a limitar (azúcares, grasas saturadas, sodio y calorías), y también considera el contenido de frutas, vegetales, frutas secas, fibra y proteínas. Por diferencia entre nutrientes a limitar y nutrientes a promover se obtiene un puntaje que determinará que el alimento sea saludable o no. Dentro de los alimentos saludables están las verduras y frutas, el yogur y la leche (descremados) ocupan los primeros puestos, seguidos por el grupo de carnes y huevos. Entre los menos saludables, los que aportan muy pocos nutrientes positivos pero muchas calorías, encontramos las comidas rápidas, los azúcares, dulces, postres, golosinas, quesos, aderezos, manteca, crema, panificados y galletitas.