JARDÍN. Plantas que estimulan los sentidos
Dueñas de propiedades especiales, algunas plantas pueden estimular nuestros sentidos. Construí con ellas el edén en tu hogar
El diseño de paisajes reivindica la sensualidad, armando espacios que estimulan los sentidos. Para esto, los jardines hispano-musulmanes del Medioevo europeo han sido una gran inspitración para los paisajistas modernos. La primavera y el verano, estaciones ideales para echar a volar nuestra creatividad, son el momento para conocer cómo cultivar algunas plantas, cuidarlas para que se mantengan sanas y aprovechar no sólo su belleza sino también sus poderes peculiares. Como es el caso de aquellas plantas que por sus elevadas cantidades de minerales, hierro, potasio, fósforo, magnesio, zinc y vitaminas, resultan un buen tónico vivificante.
El aroma de algunas flores, sus texturas que agradan al tacto, sabores de frutos exquisitos, colores que estimulan la vista, el sonido de agua en movimiento, de la brisa acariciando las hojas son elementos indispensables para lograr un jardín sugerente. Para armar este espacio se recomienda elegir ciertas plantas.
Plantas perfumadas, como jazmines, lavandas, clematis, azareros, dama de noche, madreselvas, gardenias y glicinas. Cítricas como limoneros, naranjos o mandarinos, que a su vez se pueden complementar con higueras, ciruelos, durazneros, cerezos, moras y frambuesas.
El jazmín es quizás la planta más reconfortante, debido a que su perfume actúa sobre las percepciones olfativas, propiciando un efecto relajante.
Especies arómaticas que aportan un toque especial, como orégano, tomillo, menta, melisa.
Apio. Su aroma lo convierte en el condimento ideal para estimular nuestros sentidos.
Cardamomo. El secreto de esta especie está en sus semillas. Tienen feneletilamina, sustancia que estimula y es euforizante y vigorizadora.
Canela. Es uno de los mejores afrodisíacos. Se lo usa para disminuir los problemas sexuales y para aumentar la libido. El canelo (árbol de donde proviene) es muy decorativo, tanto que los expertos lo describen como uno de los más bellos. Hay que saber que soporta muy bien el frío extremo pero no tanto el calor y que sólo hace falta sembrar una semilla para tenerlo en casa.
Así, podemos sembrar una gran diversidad de plantas de texturas y perfumes variados, con flores y follajes vistosos, que además nos aportarán frutos comestibles.