Mia

Cuando alimentars­e es un problema

- *Médicaédic­a especialis­ta en Nutrición,utrición, Miembro del Grupo de Trabajo en Trastornos­rnos Alimentari­os de la Sociedad Argentina de Nutrición (www.sanutricio­n.org.ar)

Los trastornos alimentari­os no incluyen únicamente a la anorexia y a la bulimia. Existen los llamados subumbrale­s ó no especifica­dos, pero que constituye­n el mayor número de consultas que realizan los pacientes a los especialis­tas. De hecho, el menor número de consultas es por anorexia nerviosa; luego le siguen las consultas por bulimia nerviosa y, por último, el mayor porcentaje es respecto a consultas de pacientes subumbrale­s ó no especifica­dos. Éstos no llegan a tener todas las pautas diagnósitc­as de anorexia y bulimia. En algunos casos son de menor gravedad y en otros pueden llegar a tener el mismo grado que la anorexia y la bulimia. Esto depende de la base psicopatol­ógica que tenga el paciente.

Otro tipo de trastorno alimentari­o es el conocido como “Síndrome por atracón”, que comparte una conducta alimentari­a similar a la persona bulímica, pero sin mecanismos compensato­rios (vómitos, ingesta de laxantes o diuréticos, entre otros). El 30% de los pacientes que consultan a un especialis­ta por cuestiones de obesidad tienen el “Síndrome por atracón”.

Es importante recalcar que no toda persona que tiene un proceso de adelgazami­ento o haya tenido alguna comida compulsiva y haya vomitado alguna vez, es necesariam­ente anoréxica o bulímica.

La adolescenc­ia es una etapa de la vida en la cual se desarrolla­n grandes cambios a nivel corporal y psicológic­o; dando lugar al temor y a la insegurida­d.

Es así como muchos de ellos se refugian en el hecho de querer pertenecer a sus pares a través de una imagen corporal aceptada socialment­e, llevándolo­s a estar pendientes de una dieta, de qué comen, qué no comen, cuánto pesan, si bajaron de peso o no, si los hidratos de carbono y las grasas son buenos o no.

Los diferentes trastornos alimentari­os denominado­s como “enfermedad­es multideter­minadas”,pueden deberse a factores biológicos, dentro de los cuales encontramo­s la genética; factores endócrino-metabólico­s; factores psicológic­os, y los factores sociales, es decir, el peso de la sociedad de buscar una imagen delgada.

En general, la sociedad occidental “empuja”, a través de publicidad­es, a poseer un cuerpo que, en muchos casos, genéticame­nte es imposible de lograr. Entonces se promociona­n dietas estándar, que pasan por alto las necesidade­s particular­es que puedan tener una mujer, un/a adolescent­e, una embarazada o un hombre. Estos regímenes “mágicos” que proponen resultados “rápidos” y “seguros” son nocivos para la salud; ya que quitan grandes grupos de alimentos por un período largo de tiempo, el resultado no es inocuo para la salud orgánica y la salud psíquica de la persona.

La alteración de ésta conducta alimentari­a a través del tiempo produce alteración de la secreción de ciertas sustancias del sistema nervioso central y periférico; que van perpetuand­o el ciclo.

Es sumamente importante realizar consultas precoces y llevar a cabo un tratamient­o multidisci­plinario, donde intervenga­n psiquiatra­s, psicólogos, médicos nutricioni­stas, licenciado­s en nutrición y especialis­tas en actividad física, dependiend­o de lo que necesite el paciente en cada momento.

La importanci­a del apoyo familiar es clave en los pacientes que padecen estos trastornos, porque en ellos influye el factor psicológic­og familiar. Al ser ppacientes vulnerable­s,, en su mayo-y ría adolescent­es y niños,ños, que aún dependennd­en de su familia,a, necesitan de la contención de suu entorno íntimoo para po-poder llevarevar a cabo el tratamient­o.tamiento.

 ??  ??
 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina