Aborto recurrente
Se llevó a cabo el Workshop: What´s Up IVI Buenos Aires, que reunió a especialistas en Medicina Reproductiva de España, Dinamarca y diversos países de Latinoamérica. Una de las sesiones a cargo del Dr. Bellver, médico especialista de IVI Valencia, estuvo dedicada al Aborto Recurrente, una patología de baja prevalencia en la población en edad reproductiva (15%), pero que motiva frecuentes consultas a especialistas en reproducción y obstetricia. El Dr. Bellver destacó que los factores pronósticos más importantes para estimar la recurrencia de un nuevo aborto son la edad femenina y el número de abortos previos. “Conforme vayan aumentando ambos factores también lo hará la probabilidad de aborto en un nuevo embarazo y, por lo tanto, habrá que tomar una actitud diagnóstica y terapéutica más agresiva, al igual que si existen factores concomitantes de mal pronóstico, como patologías potencialmente causales o la presencia de infertilidad”, explicó el doctor. Lamentablemente, muchas de las parejas que experimentan los abortos recurrentes no son estudiadas correctamente y no se detectan posibles factores causales, como pueden ser las anomalías cromosómicas embrionarias/fetales recurrentes que, generalmente, se producen cuando se da una alteración en la distribución de los cromosomas del bebé. “De todas las posibles causas de aborto habitual, solo unas pocas han demostrado tener una clara relación. Entre las causas más comunes encontramos las mutaciones cromosómicas (son alteraciones en el número de genes o en el orden de estos dentro de los cromosomas) o mutaciones embrionarias de novo (ocurren en el
desarrollo embrionario) que aumentan con la edad de la mujer y son las más frecuentes en el aborto del 1er trimestre, algunas anomalías uterinas, fundamentalmente congénitas, y algunas trombofilias heredadas”, aclara el Dr. Fernando Neuspiller, director de IVI Buenos Aires.
“El aborto recurrente sigue siendo un área médica con grandes incertidumbres, por lo que la investigación debe continuar en busca de factores cuya mejora pueda reducir de forma significativa el riesgo de un nuevo aborto. En cualquier caso, el cuidado emocional intensivo del inicio del embarazo, haya o no etiología de base, parece mejorar el resultado gestacional en las pacientes afectas”, concluyó el Dr. Bellver.