Chicos que no hablan
Los adultos podemos ayudarles a hablar, hablándoles. Siempre haciéndolo de forma correcta, pausada y con riqueza de expresión. No es bueno “preinterpretar” sus necesidades. Si el niño desarrolló, a través de gestos y sonidos, su propio sistema de comunicación, interpretado por sus padres y entorno, será más difícil acercarlo al habla. Los libros para bebés, ilustrados con imágenes cotidiancotidianas, las canciones con estribillos repetitivos, los jueg juegos y todo lo que pueda estimularlo son ideales para iniciarlo en el camino del habla. Todos los estímuloestímulos audiovisuales son buenos, siempre que respeterespeten la edad del niño y que no estén un una cantidad exagerada de horas frente a la pantalla. Si ven didibujitos, que sean con colores tranquilos, música no invasiva y con un contenido no agresivo. Lo mejor es que los programaprogramas sean en el lenguaje que debe aprendaprender a hablar el niño y no extranjeros.