El fin de la papada
Para una de las zonas más difíciles de tratar, llegó a nuestro país una nueva opción estética que asegura disminuir el volumen y tensar la piel de la región
Esta tecnología de vanguardia, llamada CoolSculpting, remodela y esculpe las zonas más difíciles donde la grasa está instalada y es rebelde, y es capaz de solucionar uno de los mayores desafíos estéticos: lograr la eliminación selectiva de cúmulos de grasa localizada de forma no invasiva y sin dañar el tejido circundante. La gran novedad es que ahora llegó a nuestro país el nuevo cabezal, denominado CoolMini- especialmente diseñado para la zona del bajo mentón. Así, se convierte en la solución ideal para los pacientes que, incluso habiendo alcanzado su peso ideal, persisten con una incómoda papada.
“La papada es un tejido que va acumulado grasa y perdiendo tensión con el paso del tiempo, acompañando el proceso natural de envejecimiento. Es una zona problemática y muchas veces muy difícil de tratar con dieta o ejercicio. Aunque el estilo de vida y la genética también pueden desempeñar un papel importante en su formación, a diferencia de otras áreas en el cuerpo, la grasa submentoniana es imposible de ocultar deba
jo de la ropa”, explica el Dr. Luciano Lanfranchi, médico cirujano, especia- lista en cirugía reconstructiva y estética de la Fundación San Rafael del Monte Tabor de Milán, Italia.
Frío, el gran aliado
El equipo- innovador, efectivo y seguro- está aprobado por la FDA (Food and Drug Administration) de Estados Unidos y su par europeo CE y marca tendencia en todo el mundo. Trabaja mediante la criolipólisis, que genera una “corriente” de frío que se aplica externamente sobre la piel y logra disminuir hasta el 40% de la grasa de forma definitiva.
Estudios demostraron que las células grasas son por su naturaleza, más vulnerables al frío que el resto de tejidos que las rodean. Por lo tanto, las células grasas pueden ser eliminadas de forma segura sin dañar la piel que las cubre. Otras modalidades de tratamientos como láseres, radiofrecuencias o ultrasonidos focalizados, actúan sobre la grasa pero también pueden afectar al tejido adyacente y, además, esos tratamientos eliminan solo el contenido lipídico de los adipositos sin eliminar la célula, de esta forma es que luego vuelven a tener adiposidad.
Este método de enfriamiento con-