La magia y lo mágico de Belgrano y de Talleres
La magia es el tema del fin de semana. Y para abordarlo vale una frase. “Acá no hay magia”, avisó Pablo Lavallén con cara de “muchachos, no compren espejitos de colores”. En la conferencia de prensa pos 0-0 de Belgrano ante Independiente, el DT celeste abrió el paraguas ante quienes esperan que desde el cielo lluevan goles por el Gigante de Alberdi, donde las gargantas están en tensa calma desde el alarido que generó el derechazo de Epifanio García frente a San Martín de San Juan.
La magia es el tema. Tanto que los hinchas de Belgrano le pedían en la previa al mago Willy que hiciera trucos para que Belgrano metiera un gol. “Acá no hay magia, pero cuando Belgrano haga un gol va a ser mágico”, tiró, como pronosticador, el célebre Willy en la nota que cierra este suplemento.
De la magia a lo mágico va lo de Pablo Guiñazú, el “pibe” de los 39 años que provoca asombro en los periodistas porteños que cubren ocasionalmente los partidos del “vistoso Talleres”, como rotulan al equipo de Kudelka. “No me creerían lo que hago para recuperarme, pero me duelen los huesitos, ja”, no quiso blanquear el secreto de su magia “el Cholo”.
Magia y trabajo van de la mano. El trabajo sostiene la magia, parece, y a veces con trabajo no alcanza para tener magia. Belgrano la perdió, no la tiene, se le quedó quizá en la última gran hazaña que metió: allá en Coritiba. Talleres la recuperó en el zurdazo de Guiñazú a All Boys y antes la había tenido con la aparición de Ramis en Formosa, el día de la salida del averno del Federal A. Y desde entonces hay trabajo en esa magia que acompaña a un Talleres del que todos suponen “es el equipo que puede hacerle partido a Boca”. Es el Talleres que inició la debacle del River todo ganador de Marcelo Gallardo. El 4-0 a la “reserva” del “Millo” fue el inicio de la peor semana del “Muñeco” y la mejor de ese Boca de los ocho triunfos en ocho fechas. Boca está 1º en la Superliga y el 2º, por diferencia de gol, es Talleres. Es la magia de Guiñazú y la propuesta de “igual a igual” de Talleres lo que pone a la “T” en un sitio bisagra: o se queda en eso o es más que eso. “Nosotros nos ilusionamos”, avisó Kudelka, como no achicándose ante lo que viene. Si el gol de Belgrano “va a ser mágico” cuando llegue, ¡lo mágico que sería que Talleres perfore el techo de su ilusión!