Cuando el color guía al corazón
El que quiera celeste... Emiliano Narváez tiene muchas camisetas de Belgrano y la de equipos de “celeste”.
erá por eso que al hincha le cuesta tanto aceptar la camiseta alternativa de su equipo. Por más diseño innovador o motivos especiales, no hay nada como los colores genuinos. Esa “segunda piel”, un objeto de culto para los fanáticos. Así piensa Emiliano Narváez, un simpatizante que tiene abarrotado su placard con camisetas de Belgrano. Es tan fanático del Pirata que busca todas aquellas, aunque sean de otro club, siempre y cuando tengan motivos celestes. Ni la roja que usó el elenco de Alberdi como alternativa. Ni la negra, ni la gris. A lo sumo la blanca, donde el tono celeste resalta más.
Son 30 camisetas que abarcan casi 20 años de historia. Hay algunas que serán difícil de olvidar como la “Lotto” del ascenso ante River en el Monumental. O las “noventosas” Hummel o Le Coq. O aquellas que inmortalizan al “Potro” Rodrigo. Cada una esconde una historia. Y cada una vale por los jugadores que la transpiraron y por lo que significan en la historia del Celeste.
Emiliano es un médico de 27 años nacido en Arroyito y a punto de comenzar la especialidad en oftalmología. Buena parte de su carrera la pasó en el Clínicas, a metros del Gigante, y en el corazón de un barrio que late por Belgrano.
“La primera camiseta que tuve fue a los 10 años. Fue una Mitre que tenía el dibujo de Córdoba que se va ampliando”, explica Emiliano en referencia a aquella casaca que el Pirata utilizó en 2003 y parte de 2004 (es el modelo que usó el “Burrito” Ortega en aquel amistoso ante Juniors). “Con esa sola camiseta yo era feliz. Nunca imaginé coleccionar otras. Después fui sumando y en Arroyito por el boca en boca me fueron acercando otras”, explica.
Tesoro
La que atesora especialmente es una que le regaló Gustavo Bordicio que tiene la particularidad de tener un parche con una publicidad que tapa a otra. “Tengo entendido que no hay muchas de esas porque la del parche se usó una o dos veces”, agrega. La que más le gusta es la del 110 aniversario, una de edición limitada que tiene el barrio de Alberdi de fondo. “La de la Sudamericana es linda también. Me gusta porque está la cancha y el barrio y dice ‘Primer territorio libre de Sudamérica’”, concede.
Si el equipo son los colores, el hincha ve a su equipo en cualquier camiseta que tenga al menos una referencia a los suyos. Por eso la selección de Uruguay (además de la garra charrúa) siempre fue una suerte de guiño para los piratas. Emiliano tiene decenas. Lazio de Italia, Manchester City, Marsella, Bolívar, Sporting Cristal, Estudiantes de Río Cuarto.…hasta la de Comercial Rugby Club de Mar del Plata. Y las alternativas del Barcelona, Liverpool, Arsenal, selección de España, Gremio, Santos, Argentinos Juniors. Todas tienen un “parentesco” con la del Celeste.
“Me faltan una del Zenit de Rigoni y una del Blooming del ‘Picante’ Pereyra”, avisa Emiliano. Reconoce que le faltan muchas, de Belgrano y quizás de otros equipos. Siempre celestes, claro.