La culpa no está en el otro
Luego de una semana cargada de polémicas y de suspicacias, River volvió a jugar mal y perdió 1-0 contra Vélez.
Pasan los partidos, pero no pasa el mal momento de River. El equipo de Marcelo Gallardo volvió a jugar mal, a cometer errores que paga caros y se sigue cayendo en la tabla de posiciones. El Millonario perdió con Vélez 1-0, en el Fortín, por la fecha 17 de la Superliga. Robertone fue el autor del gol del dueño de casa.
Dos malas salidas del fondo de la visita, producto de distracciones, marcaron el norte del partido. La primera vez fue a los 4 minutos de partido. Martínez Quarta pecó de exceso de confianza dentro del área de River. Le quitó la pelota Bouzat y el defensor millonario lo derribó. La jugada siguió por ley de ventaja a favor de Zárate, pero su remate fue atajado por Armani. Igual, Vigliano debió cobrar penal.
En el complemento, cuando el partido comenzaba a levantar vuelo en cuanto a alternativas, Vélez sacó la ventaja. ¿Qué pasó? Ponzio “emuló” a Martínez Quarta y también perdió el esférico cerca del área. El balón le quedó a Vargas, que con su habilidad aprovechó la desidia defensiva rival. Su centro se desvió, pero se transformó en atajo para el gol de Robertone, que definió cruzado, a contra pie de todo River.
Fue un mazazo para el equipo de Gallardo, que pocos minutos antes se había quedado con 10 por la expulsión de Enzo Pérez (doble amarilla). El rostro del “Muñeco” lo dijo todo. No le encuentra la vuelta a un equipo que luce inseguro, predecible y vulnerable.
La crisis millonaria es evidente y muy preocupante. Sin solidez, carente de ideas y con ausencia de respuestas y de profundidad. Vélez lo presionó siempre, con convicción y lo anudó totalmente al equipo de Núñez.
Lejos
En el primer tiempo, River no inquietó al cordobés César Rigamonti, de gran presente en el arco de Vélez. En el complemente, el exBelgrano tampoco tuvo mucho trabajo. Apenas un remate cruzado de De la Cruz, que el guardameta mandó al córner, y un tiro libre de Mora (que ingresó en el complemento y fue lo mejor de la visita), que pegó en el travesaño.
Después, nada. River fue intrascendente y no le generó una sola opción a Pratto, el goleador que llegó como la compra más cara de la historia del Millonario.
Pasó otra semana de quejas contra los árbitros que lo dirigen últimamente al equipo de Gallardo. Esta vez, Vigliano no fue excusa. River tiene una moneda recurrente que es la de no jugar bien.
Al buen ingreso de Mora (fue el mejor valor anímico y futbolístico) se puede sumar a un Armani que poco pudo hacer en el gol de Robertone, pero que va ganando presencia en el área con sus tapadas y sus salidas a cortar centros. Pero la línea de cuatro que lo debe resguardar lo deja muy solo.
Contundente
Los números desnudan la malaria de River. Suma seis derrotas en fila como visitante, en las que le marcaron 10 goles y apenas convirtió uno. Semejante faena lo sigue hundiendo en la tabla de posiciones, en la que hoy aparece en el puesto 20, con apenas 19 puntos (a 21 del líder Boca). Y eso podría empeorar hoy con los resultados de los cotejos que le darán continuidad a la fecha. River piensa en su próxima participación en Copa Libertadores. Pero con este nivel...