Una final por el objetivo y la Copa
El partido de esta tarde, a las 15.30, ante Colón en el Gigante de Alberdi, por la 25ª fecha de la Superliga, se transformó en una final por donde se la mire para Belgrano.
Por un lado, el triunfo le permitiría alcanzar la línea de los 40 puntos, objetivo que se plantearon los jugadores, el cuerpo técnico y los dirigentes, como el nivel a alcanzar de mínima en el presente campeonato.
Por el otro, hoy el Pirata y el Sabalero (más Unión) se encuentran con 37 unidades en el 11º puesto de la tabla, que es precisamente el último escalón para acceder a la Copa Sudamericana. Por lo cual, de conseguir una victoria el conjunto cordobés, logrará superar a su adversario en esa puja directa que tienen por acceder al certamen continental.
De esta forma, el partido es una finalísima para el Celeste porque le otorga premio doble si lo gana: objetivo y copa, al mismo tiempo de no sumar de a tres, lo deja en deuda en los dos frentes.
Cuestión lateral
Marcelo Benítez, no se recuperó de su cuadro gripal y de esta manera no podrá jugar ante los santafesinos, con lo cual el reemplazante de Juan Quiroga (intervenido quirúrgicamente esta semana) en el equipo inicial será Sebastián Luna, quien volverá a estar en cancha tras 18 fechas de ausencia, porque el último partido que disputó fue ante Talleres (15 de octubre de 2017) en el Gigante por la sexta jornada, cuando al equipo lo dirigía Sebastián Méndez.
Lavallén resolvió sacar del equipo a Benítez hace un par de partidos. La razón futbolística fue la de buscar mayor firmeza en la marca y darle más libertad al extremo de ese costado: Jonás Aguirre.
Luna ya jugó como lateral izquierdo en la temporada anterior con Leonardo Madelón como entrenador, fue ante Racing Club (en Instituto), con Colón en el estadio Kempes y frente a Banfield en campo del Taladro.
El partido, también puede ser una bisagra para que la charla por la continuidad del entrenador Lavallén de arranque. Los dirigentes ya le han manifestado el deseo de extensión contractual y el DT resolvió esperar hasta lograr lo planificado, por ello, si el resultado es positivo, esas conversaciones previstas para después del 14 de mayo, se puedan dar con antelación y cerrar un acuerdo para las partes loantesposible.
Colón llega sabiendo que un empate no es despreciable, más aún conociendo que el 10 de mayo jugará los 68 minutos que le restan del partido con Vélez y que iguala 0 a 0, con lo que tiene una extra para sumar puntos.
La “final” es en Alberdi, y la gente de la “B” quiere cantar victoria.