Cómo cuesta dar ese gran último salto de calidad
Talleres y Belgrano soñaban con un sábado de gloria. De festejos. Uno por entrar en la Libertadores y otro en la Sudamericana. Los dos enfrentaban a equipos descendidos. Sin compromisos. Nada podía fallar... Pero falló. Algo no hicieron bien nuestros equipos y todos los hinchas del fútbol cordobés quedaron masticando bronca. Impotencia. Decepción.
¡Cómo cuesta dar el gran salto de calidad! Frente a partidos que son trascendente, nuestros equipos no están a la altura. Pasó ayer y viene sucediendo en los últimos tiempos en la Primera División. Así, aspirar a ser protagonistas en el fútbol argentino se hace cada vez más difícil.
Talleres. La tenía servida a la oportunidad de clasificar ayer mismo a la Libertadores 2019. Cuando salió a jugar en Bahía Blanca sabía que Huracán había empatado. Es decir que un triunfo frente a Olimpo dejaría abajo al Globo. Sin embargo la “T” no pudo con un equipo sin otro motivo que despedirse de su público. Apenas empató sobre la hora. Y la bronca fue aún mayor cuando más tarde Independiente perdió en Santa Fe.
Si hubiera ganado Talleres en Bahía Blanca, hoy estaría festejando el ingreso a la Copa Libertadores 2019. Ni más ni menos. Pero no pudo. No jugó la “final” que se pedía que hiciera. Como tampoco la jugó en La Bombonera cuando fue como escolta del líder Boca y apenas le hizo cosquillas.
Aquella vez falló. Ayer falló. En el último tramo de la Superliga falló: ganó un partido de los últimos siete. Así es muy difícil pelear por un título o terminar entre los cinco primeros. Ahí le faltó dar ese salto de calidad al equipo. Hoy depende de que mañana pierda Racing contra Colón en Avellaneda para clasificar a la Libertadores. O que un club argentino gane la actual Libertadores o Sudamericana para entrar a esa Copa. Hay que destacar que se metió en la Sudamericana 2019, pero por lo hecho en gran parte del torneo la bronca queda flotando.
Belgrano. Jugaba anoche su último partido en esta Superliga 2017/2018 en el Gigante de Alberdi contra Temperley, un equipo descendido. En su cancha, la “B” estaba invicto en 12 presentaciones: con 5 victorias y 7 empates. Entonces, pensar en un triunfo que lo deje muy cerca de la Sudamericana 2019 era lo más lógico. Pero no. Cuando más necesitaba ganar, decepcionó.
Luego de un primer tiempo para el olvido para Lucas Acosta, la “B” cayó y dejó pasar la posibilidad de quedar entre los 11 mejores de la tabla para volver a jugar un torneo internacional.
Otra vez ese salto de calidad no se dio. Ese grito “¡acá estoy yo!” como bien lo hizo en 2011 en el Monumental contra River no se escuchó.
El fútbol de Córdoba cierra esta Superliga con buenas campañas, pero con un cierre decepcionante.
SI UN CLUB ARGENTINO GANA LA ACTUAL LIBERTADORES O SUDAMERICANA ABRIRÁ NUEVAS CHANCES A TALLERES Y A BELGRANO.