Tala bajó al líder y Urú es puntero
En Villa Warcalde, el blanquinegro impuso su plan de juego y le ganó con autoridad al hasta ayer líder del Súper 8.
Por primera vez en el año, Tala emitió señales de que está en condiciones de defender su tetracampeonato. Si bien el 37-13 sobre Athletic no es su única victoria ante un rival de fuste, por primera vez mostró aspectos propios de un equipo maduro. Con inteligencia, el equipo dirigido por Horacio Ambrosio supo neutralizar la ferocidad de un adversario que llegó a Villa Warcalde como banca, lo sometió a puro tackle y logró reducirlo a un actor de reparto.
Si bien en cada movimiento de ataque Tala intenta ser profundo y agresivo para someter a sus rivales en los puntos de contacto, esta vez su arma más importante fue la presión de su defensa y la lucidez para aprovechar sus oportunidades. Pese a no contar con su primera línea titular (Escutti y Cetti están lesionados), se las ingenió para poner en aprietos (y generar infracciones) a un pack que tiene un scrum para respetar.
Tala logró que un rival que venía repleto de confianza, titubeara en aspectos básicos y funda- mentales como dar bien un pase o cuidar la pelota. Y eso encadenó una serie de errores defensivos que pagó caro. “Planteamos un juego dinámico pero no nos salieron las cosas. Dijimos de no hacer penales y en el primer tiempo hicimos un montón”, analizó Leopoldo Herrera. Según “Apo” esta derrota ayudará al equipo a no confiarse en el futuro. “Es mejor que nos den esta cachetada ahora para que nos demos cuenta que todos los equipos son duros y que hay que dar el ciento por ciento en cada partido”.
Fueron los errores de Athletic los que posicionaron al blanquinegro en una situación de dominio. La paciencia y el contragolpe fueron armas que el local usó a la perfección. Franco Cuaranta, un especialista en transformar errores ajenos en tries propios, apoyó tres veces. El que marcó a los 14 minutos del segundo tiempo fue letal porque dejó el marcador 22 a 6, pero además porque la jugada era un franco ataque del rojinegro.
Además del wing, la tercera línea merece un lugar destacado, y especialmente Federico Simondi, la “joya” del pack, convocado recientemente a los Pumitas. El octavo mostró solvencia y agresividad, y es, desde comienzos de año, uno de los jugadores más regulares de Córdoba.
“Los estudiamos y vimos que tenían un par de defectos que eran oportunidades para atacarlos. Igual, somos fieles a nuestro estilo e intentamos hacer nuestro juego”, contó el capitán Cristian Nacassian, quien mostró respeto por el hasta ayer líder del Súper 8. Sin embargo, el “10” también mostró confianza en Tala. “Nosotros no somos menos que nadie. Confiamos mucho en lo que sabemos hacer. Tuvimos un año muy adverso, con muchísimos lesionados, algo que en el plantel yo no había vivido nunca. Con tantos cambios cuesta un poco y lleva tiempo amalgamar un equipo. Pero hay que tener confianza en nuestro juego”, sostuvo.
Si algo dejó en claro el resultado, además del poder de fuego, fue cierto carácter ambivalente en Tala, que en más de una oportunidad este año sufrió para vencer a rivales inferiores.