Mundo D

UNO POR UNO

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HERRERA. Le atajaron el penal al anunciar bastante su remate. Poco pudo hacer en el gol señalado por Troyansky.

GODOY. Pasó poco al ataque y no estuvo preciso en el transporte e la pelota. Ganó y perdió con Fragapane. Lo mejor fue el cruce a Soldano que venía para empujar.

ARAUJO. Quedó varias veces en línea con Carlos Quintana. Troyansky y Soldano lo aprovechar­on bastante. Le sacó el gol al 22 tatengue en una gran recuperaci­ón.

QUINTANA. Mas allá de que quitó varias pelotas está claro que fue responsabi­lidad de los centrales que en el 1-1 haya quedado mano a mano el petiso Escobar con el alto Troyansky. Ni hablar del 2-1 de Soldano, quien también cabeceó sin problemas.

ESCOBAR. Lo mejor fue la proyección que generó en el penal. Luego, estuvo muy impreciso en la salida, perdió en el 1-1 con Troyansky y en la mayoría de las pelotas que le tocó defender. Arrancó muy bien; luego, siguió muy mal.

CUBAS. Pocas veces pudo soltarse en ataque,como en el 1-0 de Arias. Tuvo que correr a la par de Pablo Guiñazú para recuperar la pelota. Cuando corre más de lo juega, el equipo lo siente.

GUIÑAZÚ. Cortó y quitó bastante. No fue suficiente. Salió muy cansado y entró Soñora.

ORTIZ. Gravitante en el primer tiempo y por la banda. Asistió a Arias en el 1-0

MARONI. Fue lo mejor del primer tiempo; pero luego se diluyó hasta quedar implicado en una jugada de expulsión que terminó incidiendo en el juego.

RAMÍREZ. Algunos arranques hicieron ilusionar de que sería importante, pero sólo se quedó en la intención.

ARIAS. Un gol y un pase bárbaro para el penal que le hicieron a Ian Escobar. Después, en el complement­o, ya no recibió suficiente asistencia de juego.

SOÑORA. Su ingreso fue para hacer sociedad con Maroni, pero sólo tuvo un encuentro y el exInstitut­o vio la roja. No tuvo la incidencia de otros.

ARAUJO. Fue uno de los cambios para ganar el juego. Casi no se notó su presencia en la cancha.

POCHETTINO. Poco y nada.

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