Básquet: triunfazo de Argentina
Perdía por 22, lo dio vuelta y venció a Venezuela 73-72.
La selección logró triunfo resonante. Una victoria de esas que pueden marcar el rumbo de un equipo o de un grupo. El equipo nacional, sin los jugadores estelares que lograron el histórico subcampeonato en el Mundial de China 2019, protagonizó una remontada notable para vencer a Venezuela, en Caracas, por 73 a 72, en el marco de la clasificación a la AmeriCup 2021.
Argentina llegó a perder por 22 con los venezolanos (62-40) a poco más de dos minutos para finalizar el tercer cuarto. Y con convencimiento, peleando, poniendo el corazón y equiparando fuerzas desde lo físico (lo que le había faltado antes) se lo dio vuelta al equipo “Vinotinto”, un elenco con mayor experiencia y tiempo juntos.
El seleccionado de Sergio Hernández había perdido en el primer partido de la competencia, ante el mismo rival, el pasado jueves en San Luis por 74-68, y sumó la primera victoria del 2020, un año que tiene a los Juegos Olímpico de Tokio como gran cita. La primera después de la recordada Copa del Mundo del año pasado. Sin tener aún el ADN del equipo que brilló en China, el triunfo siempre viene acompañado de tranquilidad para encarar un proceso. Porque este grupo tuvo escasas prácticas juntos. Porque este elenco que citó “Oveja” necesita conocerse y conocer la idea del entrenador.
Apenas tres jugadores repiten del Mundial (Máximo Fjellerup. Agustín Cáffaro y Tayavek Gallizzi), otros tantos integraron el proceso previo, algunos regresaron al seleccionado y cuatro tuvieron su estreno en el equipo mayor durante esta “ventana”.
Uno de ellos fue el cordobés José Vildoza, uno de los jugadores claves en la remontada de Argentina. El base formado en Barrio Maipú, que juega en San Lorenzo, le dio dinámica y atrevimiento cuando la selección parecía “apichonada” ante el dominio venezolano.
El otro cordobés del plantel y único que no participa de la Liga Nacional y hace sus primeras armas en España (en Manresa), Juan Pablo Vaulet, también mostró el camino para pelearle la supremacía a los locales. El alero formado en Hindú se hizo fuerte bajo los cestos y mostró el camino. Suma apenas cuatro cotejos en el elenco nacional. Además, Cáffaro, que jugó su partido 15 en la selección mayor, ingresó a la cancha para darle el salto de calidad que necesitaba al equipo en el momento justo. El chico de 2,10 metros y 25 años, que esta temporada viste la camiseta de San Lorenzo, con sus largos brazos fue indetenible para los jugadores de Venezuela, quienes sintieron el peso del partido junto al esfuerzo físico.
Y en el final, cuando cada pelota cotizaba como un triunfo, Pedro Barral, otros de los debutantes, clavó un triple que aseguró la festejada victoria de la nueva selección argentina.