Farré y su futuro como dirigente.
El volante dejaría el fútbol y analiza sumarse a la “B” en una función distinta. Podría ser el próximo mánager del club luego de las próximas elecciones.
Desde la capital de la provincia de Santiago del Estero, a unos 440 kilómetros de barrio Alberdi, Guillermo Farré palpita todos los días lo que se vive en Córdoba. Lo que le pasa a Belgrano y lo que puede pasar en su futuro inmediato.
El actual jugador de Mitre hace la cuarentena junto a su familia en la provincia norteña: “Me quedé aquí porque en un principio no se sabía cuántos días iban a ser. Por la escuela de los chicos y esas cosas. Con tres hijos es difícil que te aburras. La verdad es que no he tenido mucho tiempo libre”.
Farré se fue del Pirata en junio de 2017 después de 10 años en la “B” y 327 partidos con la Celeste contra la piel. Por eso no es extraño que en los proyectos de los candidatos se encuentre su nombre sonando para ser parte del futuro de la “B” tras las elecciones.
Fue Armando Pérez el primero que habló de él y que lo mencionó como un firme candidato a “dar una mano en lo deportivo”, pero es el mismo jugador el que asegura que habló con “Armando y con ‘el Luifa’ también”.
Cerca de su retiro, el volante aseguró: “Si el parate se extiende mucho en el tiempo, estoy viendo con buenos ojos dejar. Porque en lo personal he aprovechado esta cuarentena para dedicarle gran parte del día al análisis del fútbol, desde lo mental y ya no de lo físico. Entonces estoy viendo que me atrapa y me apasiona”.
“Mi intención es no llegar al club para ser utilizado como una imagen. Sino que busco aportar en la faceta deportiva e institucional. Por eso hago énfasis en este aspecto y por eso digo que veré los proyectos para sumarme”, sostiene.
Queda claro que Farré no quiere ser solamente la imagen del club o ser recordado por su histórico gol a River en la promoción 2011, sino que pretende otro rol: “El próximo camino que busco transitar en Belgrano quiero que sea reconocido por el profesionalismo, el trabajo y la dedicación que le ponga. Y no por el jugador, porque el jugador ya pasó y dejó una imagen positiva. Ahora, quiero inclinarme hacia otra área, iniciar algo nuevo, el que será juzgado por el accionar del día a día y al que no se le permitirá irregularidades o falta de capacidad”.
“El club en el plano institucional tiene un montón de cosas. Pero en lo futbolístico hay que rever mucho y saber porque pasó lo que pasó en el último proceso. Hay que minimizar el margen de error y potenciar áreas que le pueden dar al jugador valores para el desarrollo integral”, prosiguió Farré.
Preparado y estudiando
“Guille” se está preparando para seguir en el mundo del fútbol y cuenta: “En estos días, en los que tenés tiempo estás mucho con las computadoras y te abre la cabeza. La verdad es que me estoy inclinando hacia el lado del análisis desde fuera de la cancha, que es el aspecto que seguiré cuando deje de jugar”.
Esta preparación de la que habla es la que lo pone en la órbita de quienes quieren conducir el club tras las elecciones.
“Tuve la oportunidad de hablar con los dos candidatos y eso me pone contento. Estoy predispuesto a escuchar los proyectos y a introducirme en un área en la que ellos consideren que le puedo ser útil. Al mismo tiempo, también quiero ser feliz dentro del club dándole lo mejor”, prosiguió Farré.
Más allá de quien sea el ganador en los comicios, Farré asegura: “Le he dado mi palabra que me sentaré a hablar con ellos. Y si todo encaja dentro de lo que pretendo, es muy posible que ande por Córdoba en breve”.
“Estuve 10 años en Córdoba, allí nacieron mis hijos y me hice la casa para quedarme en la provincia. Hay muchos factores que indican que será allí donde me voy a radicar. Y con la posibilidad de Belgrano latente, la de poder ayudar y colaborar, realmente eso me suma para la decisión”, continuó.
El sentido de pertenencia con el Pirata le brota en sus palabras: “La categoría le queda chica a Belgrano.
Pero es donde estamos y tengo muchas ganas de poder ayudar. Si se necesita alguien con identidad y que pueda transmitir los valores de la institución y se ha pensado en mí, son muchas las cosas que cierran para desembarcar en Córdoba”.
Identificación
“Haciendo una comparación a gran escala y siguiendo la línea de otros clubes que están haciendo bien las cosas. La gran mayoría tiene en su estructura mucha gente identificada con el club. Cualquier jugador que llegue a primera o juveniles, tendrá gente que está autorizada a hablar de Belgrano, que le pueda contar cómo era hace 10 años, que se construyó, cómo se hicieron todas las cosas”.
El final se asoma
Un prolongado impasse en el torneo “jubilaría” a Farré, porque a los 39 años se complica su retorno: “Es así (se ríe), es un garrotazo que te puede cambiar la carrera. Lo dijo el ‘Pepe’ Sand el otro día: el fútbol no me retiró, pero parece que el coronavirus me hará dejar. Y estoy medio parecido. Es la realidad, a mi edad y con todas las dudas que hay sobre los torneos, sin la posibilidad de entrenar sabiendo cuando se jugará y eso, es cuando te empiezas a replantear un montón de cosas, entre las cuales aparece un alto porcentaje de que cuando termine el campeonato deba dejar de jugar”.
Guillermo Farré está en el horizonte del Pirata y con la función de mánager.