A desenredar trámites
La ventanilla única municipal funciona desde 2013 y agilizó los plazos, pero sólo recibe el trámite cuando están cumplidos todos los requisitos. Hay quejas por demoras en otras reparticiones.
Con la ventanilla única, la ciudad avanzó en simplificar y acortar los plazos para habilitar nuevos negocios. Pero esa gestión arranca cuando están listos los requisitos previos. Hay demoras en otras áreas públicas.
La simplificación y la agilización de los trámites es una tendencia en un mundo con más herramientas tecnológicas al alcance de la mano.
A nivel nacional, se avanzó en la despapelización y en la digitalización en diversas áreas, y para las empresas, se implementó un nuevo tipo societario y un procedimiento más sencillo. Sin embargo, para que una firma o una industria pueda operar, necesita el visto bueno municipal.
La habilitación de negocios en la ciudad de Córdoba avanzó hace unos años con la ventanilla única. Pero los empresarios todavía se quejan del proceso, ya que, si bien se solucionaron y ordenaron muchos problemas anteriores, no está todo resuelto.
La nueva ordenanza es de 2012, y la ventanilla única se implementó a finales de 2013, en el marco de un programa de ordenamiento normativo y de procedimientos que contó con la participación de la Agencia de Desarrollo Económico de Córdoba (Adec) y el financiamiento del Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
Desde entonces, la repartición se puso al día con los numerosos expedientes atrasados y con la digitalización de la documentación. Además, otorgó 30 mil habilitaciones, con un promedio de 7.500 por año y más de 600 por mes. Estos son datos que se desconocían porque el sistema anterior no lo permitía.
“El tiempo promedio de demora del trámite es de 20 días hábiles. En general, estamos en el 85 por ciento del cumplimiento de los plazos de la ordenanza”, señala José María Olmos, secretario de Fiscalización y Control de la Municipalidad de Córdoba.
Los plazos oscilan entre cinco días hábiles para actividades de riesgo muy bajo y 30 días para las de riesgo alto. El tema es que estos tiempos empiezan a correr una vez que se presenta la documentación completa en las oficinas de Habilitación de Negocios en el Palacio 6 de Julio o los centros de participación comunal (CPC).
Por ahora, todos los papeles se presentan en forma personal y luego se digitalizan, pero las ordenanzas municipales todavía no permiten el expediente digital, lo cual habilitaría a realizar el trámite a través de una plataforma web, algo que ya es muy común en otros ámbitos.
Un camino previo
Pero para llegar a la ventanilla única, previamente, la empresa tiene que contar con todas las habilitaciones de Ambiente, Desarrollo Urbano, Protección Humana, Calidad Alimentaria, Recursos Tributarios, Obras Privadas y otras reparticiones, que dependen de cada caso (según nivel de riesgo y actividad).
También hay que llevar la inscripción en la Administración Federal de Ingresos Públicos (Afip) y en el Impuesto a los Ingresos Brutos (Dirección de Rentas).
Si alguna de estas cuestiones faltan, se otorga una habilitación provisoria por 30 días, aunque la renovación de esta situación puede prorrogarse en el tiempo (ver aparte). “Un caso común es el de las industrias que tienen su planta en obras y que cuentan con una (habilitación) provisoria que les permite estar en regla”, explica Olmos. Las exigencias dependen de la clasificación de la empresa. En la ordenanza de 2012 se establecieron cuatro niveles de riesgo y diferentes requisitos:
Muy bajo. Sólo presentan la solicitud con una declaración jurada y se inspecciona luego de habilitarse. Bajo. Requiere una inspección previa.
Intermedio. A lo anterior se agrega la certificación previa de Seguridad e Higiene.
Alto. Necesita la aprobación de Bomberos, que depende de la Provincia.
No tan única
“El problema de la ventanilla única es que funcionaría si fuera única en serio. En Habilitación de Negocios, los tiempos se han acortado, pero no así en las otras reparticiones”, se queja Daniel Racca, gerente de la Cámara de Ferreterías, Sanitarios y Afines. “Las distintas áreas son compartimentos estancos, cada una con sus propias exigencias”, agrega.
En la Cámara de Comercio de Córdoba reconocen el avance y el trabajo de los funcionarios, pero admiten que hay que “aceitar mecanismos” que aún no funcionan en la habilitación de nuevos negocios. “Hay opiniones encontradas al interior de los distintos sectores que componen el comercio de Córdoba y algunos sostienen que aún se demora mucho desde la Municipalidad y se continúa siendo rehén de los tiempos burocráticos internos del Palacio 6 de Julio”, dice Cristian Pastore, director ejecutivo de la Cámara.
Los empresarios también piden mayor inspección conjunta del Municipio y la Provincia para detectar negocios habilitados, algunos por desconocimiento, porque creen que sólo necesitan la inscripción impositiva para poder operar y otros, porque no cuentan con la aprobación y tampoco tienen un aval provisorio.