Clases digitales para empresas
Se multiplicó la oferta de capacitación para atender la demanda de compañías que están en el proceso de transformación tecnológica.
La tecnología está cambiando todos los sectores y la educación no es una excepción. Las carreras largas, que duraban para toda la vida, ya no alcanzan; ahora el aprendizaje es continuo y requiere una actualización permanente.
En ese marco, las necesidades de las empresas que atraviesan el proceso de transformación digital son cada vez mayores y más acuciantes. Esta realidad provocó un cambios en la oferta: ya hay compañías privadas que entendieron esta situación (llamadas coding school o escuelas de programación) y las universidades también están haciendo un esfuerzo.
Ya no se trata sólo de las demandas de las firmas tecnológicas o del área de sistemas de las empresas de cualquier sector, sino que los requerimientos atraviesan todas las organizaciones. Desde administración hasta marketing, pasando por operaciones, ventas o recursos humanos, todos tienen que adaptarse.
Las modalidades de enseñanza también se adecuan y combinan una parte presencial con otra a distancia, con foco en la práctica. Muchas aplican el llamado aprendizaje inverso: el alumno estudia el tema y luego tiene tutorías con los profesores para practicar y sacarse las dudas.
Sebastián Spaccesi, gerente de operaciones del Córdoba Technology Cluster, explica que las academias especializadas van a lo que necesita específicamente el mercado, que es algo más que el programador junior, recién iniciado.
Desde la entidad se están reali
zando muchas acciones y alianzas con instituciones privadas y universidades. En cuanto a la especialización, apuntan a dos cuestiones.
Por un lado, impulsa que las empresas y las escuelas le otorguen herramientas más específicas a ese junior para que tenga más conocimientos, por el otro, trabaja en el proyecto de una escuela de programación para que las pymes que no pueden capacitar en forma interna envíen allí a sus empleados.
Cambios a todo nivel
El cambio tecnológico abarca un gran número de cuestiones: están las nuevas herramientas informáticas, pero también la adaptación a las nuevas formas de trabajar y la mejora en la presentación ante los clientes.
“Para las compañías hay dos niveles de desafío: uno, el de cambio cultural interno e implementar una mentalidad más digital. De ser compañías lentas y jerárquicas, pasar a ser ágiles y horizontales, en las que el error no sea estigmatizante”, dice Iván Bence, director de Estrategia y Nuevos negocios de Digital House.
El segundo desafío: “Las implicancias concretas de habilidades y herramientas prácticas que deben desarrollar, con tres grandes focos: datos, programación y marketing digital”, agrega.
La firma fue impulsada por grandes emprendedores, entre ellos, los dueños de “unicornios” argentinos. En agosto llegará a Córdoba, en alianza con Prominente, para ofrecer cursos intensivos de cuatro o cinco meses, pero ya tienen acuerdos corporativas para capacitación en las empresas.
Tomás Escobar, CEO y fundador de Acámica, explica que “la brecha digital en América latina alcanza a 450 mil personas y se está acrecentando por los cambios exponenciales”.
Y añade: “Esa brecha es tan grande porque no abarca solamente al área de sistemas y desarrollo, sino que impacta en todas las industrias. En todas se genera información y datos y, con ella, la computadora puede tomar mejores decisiones. Esto genera más eficiencia y un impacto directo en el negocio, y todos tenemos que entender cómo funciona”.
Acámica trabaja con usuarios finales y empresas en el país y en Córdoba, en cuatro carreras relacionadas con el diseño de usuario, programación y desarrollo y la ciencia de datos.
Escobar sostiene que en nueve meses, una persona sin conocimientos previos específicos se puede reconvertir y reinsertarse en la industria tecnológica.
Entendiendo la información
“La tecnología actual no sólo necesita del mejor talento, sino de datos, mucho datos”, remarca Félix Melinsky, director de Ar Consultores y Desafío Latam Córdoba, compañía de origen chileno que capacita, en cinco especialidades, con la modalidad de boot camp, un entrenamiento intensivo y focalizado en la práctica.
El ejecutivo explica que machine learning abarató la capacidad de trabajar con gran cantidad de datos. “En un mundo inundado de información irrelevante, la claridad es poder”, señala, parafraseando al israelí Yuval Harari.
“Por eso todas las áreas de las empresas y sus empleados en puestos de decisión alta y media van a necesitar capacitarse en los aspectos de la ciencia de datos o inteligencia artificial”, agrega.
Además, las instituciones están poniendo foco en herramientas para mejorar la productividad. “Las empresas ven que empoderar a sus empleados en el uso de la tecnología representa ahorro de dinero y más ingresos, porque aumenta la competitividad y hace el trabajo más eficiente”, indica Eduardo Frank, director de Intertron Education.
Esta compañía cordobesa nació hace 20 años para prestar servicios tecnológicos a empresas y con el tiempo creó una unidad educativa para capacitar en herramientas que apuntan al usuario de la información.
Están relacionadas con el programa Office, la nube (cloud), metodologías ágiles, gestión de proyectos, scrams (trabajo en equipo), tableros de inteligencia de información y de negocios.
LAS COMPAÑÍAS AFRONTAN DOS DESAFÍOS: EL CAMBIO CULTURAL INTERNO Y LA CAPACITACIÓN EN NUEVAS HABILIDADES.